Capítulo Uno

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Despertamos en la mañana, temprano o eso creía yo... con la cortina cubriendo la ventana me era imposible saber que horas eran, al menos una aproximación.

Cuatro días. En cuatro días quizá no exactos -por la hora- Alex cumpliría sus 17 años y como dijo Mamá, la semana la pasará solo. Sinceramente eso me dolió en parte, o sea no me tomó como una compañía, nunca lo tomó en realidad... a Mamá no le agrado, pero ella a mi sí, es una persona muy bonita, por fuera quizá no mucho (su nuevo corte la hace ver más vieja), pero por dentro es una mujer preocupada de su hijo y por eso no le gusto, aunque ha pasado tiempo, cuatro años... yo la entiendo.

- ¡Dios, que hace sueño!

Para estar a punto de cumplir 17 años, habla muy mal.

Abrió las cortinas y pude detectar una hora aproximada de las una de la tarde... para nada temprano.

- Vamos, Rex. A comer.

Tomó la Jaula y bajamos la escalera hasta la cocina, vacía. Sin Mamá ni papá, bueno nunca bajo cuando están ellos, pero escucho sus voces. Las únicas veces que estoy fuera del cuarto es cuando está Juan Alberto, o Jano como lo llaman el resto de la tribu de Alex.
Como lo detesto. Siempre quiere tocarme, pero dice que le doy asco, que mi piel es un asco.Se nota que jamás vio sus granos rojos en el espejo.

Alex me dejó sobre el mesón y salió por la puerta trasera. Miré hacia alrededor y saqué la lengua para saber que pasaba. Gracias a eso, sentí que Alex volvía con algo en la mano. Alimento.

- Había una ratita en la trampa, ten.

Abrió la Jaula y me aventó el ratón. Le habría mordido si no fuera mi dueño. Me cayó de un golpe en la cabeza.
Tomé la rata y me di vuelta a comer, no me gusta que me vean.

* * *

Alex

Tocaron la puerta y dejé la cuchara dentro del tazón, me paré con la boca llena de cereal y abrí. Era el cartero.

- Tengo una entrega para...- leyó una hoja que traía con dificultad.- el señor Vagniluca.

Vagniluca, ¿qué clase de apellido mafioso es ese?

- Equivocado.

- Uh... ¿sabe dónde es? tengo esta dirección.- Me mostró el papel arrugado

- Señor, si usted lee bien, eso está casi al otro lado de la urbanización, este es el sector 1, usted busca el sector 7.

El hombre releyó la hoja y me miró apenado.

- Usted comprenderá la edad, es más complicado.

- Sisi, le entiendo, además dice ''calle Moro'', esta es la Mora.

- Oh... vaya, gracias, joven.

- No hay de qué.- el hombre giró y se fue en su bicicleta.

Cerré la puerta y suspiré.

- Pobre hombre.

Volví a la cocina y me senté a comer otra vez. Miré a Rex, es decir, donde debería estar. No estaba.

- ¿Rex?... ¡Rex!

¡Soy un idiota, dejé la jaula abierta!

* * *

Rex

Es un idiota, dejó la Jaula abierta. 

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⏰ Última actualización: Dec 04, 2016 ⏰

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La collina sotto le lucciole (Libro en español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora