El comienzo de una nostálgica familia.Sekaiichi Hatsukoi; Yaoi.

¡Corre,corre, corre!

Capitulo 4.- ¡Corre, corre, corre!

Pov. Onodera

Ya pasa de medio día. La claridad cubre toda la ciudad, y un agradable ambiente envuelve a todo Japón. Está noticia ha tumbado cada plan que tenía junto a Masamune. Se apoderó de nosotros, volviéndose la mayor alegría para ambos. Es increíble, estoy asustado de todo esto y aún no entiendo cómo fue posible, pero el apoyo por parte de Masamune llena mi cuerpo de fuerza para seguir con esta maravilla.

Seremos padres, y quisiera que lo entendieran.

-¿Y bien? ¿A qué se debe su visita?-Preguntó mi Madre alegre, una vez ya habíamos llegado a la sala. Ella tomo asiento en el sofá frente a nosotros, esperando ansiosa lo que pudiéramos decir. Sin embargo, -No, no, esperen. Mejor no me lo digan.- Se interrumpió a su misma. -Querido, ¿Por qué tardas tanto? ¡Los chicos vinieron a vernos!

¿Por qué esa emoción? ¿Cuánto ha pasado desde la última vez que nos vimos? ¿Unas cuantas semanas? ¿Un mes cuando mucho? Esto es extraño.

-Lo siento Cariño, estaba arreglando unos documentos—.Se disculpó mi padre de manera despreocupada, llegando al lugar y tan pronto mi mirada se cruzó con la de él, una agradable sonrisa se poso en sus labios. — ¡Hijo! No creí que podría verte tan rápido—.Dijo alegre impulsándome a levantarme y ser víctima de un fuerte abrazo. Se separo levemente de mí antes de poder hablar. — ¿Cómo estás? ¿Va todo bien? ¿Quieres que hable con mis abogados para tu divorcio?

-¡Querido! - Mi Madre le regaño. Sólo hizo una mueca y se separó de mí, sin antes no indicarme con la mirada que no estaba bromeando.

Cierto, la última impresión que tiene mi padre de Masamune, fue cuando canceló el matrimonio un día antes de la boda.

-¿Cómo puedes decirle eso a mi niño? Él es feliz al lado de Masamune, y nuestro yerno nunca haría algo que lo lastimara de nuevo porque si lo hace, sabe perfectamente lo que le pasará. -Pronuncio mi Madre con calma, y esa sonrisa suya que lograba erizarte la piel. Creo que me siento un poco mal por Masamune.

-No se preocupen señor y señora Onodera, les puedo asegurar que no lastimare a Ritsu. -Dijo con claridad, al ponerse de pie y tomar con delicadeza mi mano al sonreírme tiernamente. A este paso mi corazón va a derretirse.

-Oh vamos Masamune, ya te había dicho que puedes llamarme Mamá, eres parte de la familia.