P A R A D I S E

C11

Hada PDV.:

Entro al apartamento cerrando la puerta detrás de mi, apoyándome de espaldas en ella, dejandome caer de a poco al piso. Trato de recordar como coño pude llegar a tal grado de que Stryder tuviera que ayudarme. Cerrando los ojos, calmando mi respiración, poco a poco los recuerdos vienen a mi mente.

                                                                                                +++

Salgo disparada de esa casa infernal, no tengo miedo de presionar el acelerador y pasarme unos cuanto semáforos en rojo. No quiero ir al apartamento en estos momentos, ya que recordaría el porque de mi estadía allí, haciéndome enojar mucho mas.

Sigo recto sin saber a donde voy, sin darme cuenta termino en la playa, un buen lugar para dejar salir todo.

Bajo de mi auto cerrando la puerta con fuerza, camino directo al bar que se encuentra cerca de la orilla, donde vi por primera vez a Stryder. Pido un botella de ron y la cargo a mi cuenta, la cual se descontara de mi cuenta bancaria.

Camino a las rocas que están cerca de el mar, donde siempre me siento  a pensar, estando aquí, puedo calmarme haciendo que el alcohol pase por mi garganta quemando a su paso.

Al pasar el tiempo viendo como la botella lentamente perdía su contenido, los recuerdos de todos estos años fueron pasaron por mi mente.

+++

 -¡Tio! ¿Qué estas haciendo?- me tiene encerrada en mi habitación, tiene una cara rara que no me gusta, me asusta.

-Tranquila mi pequeña Hada, esto sera rápido- me tumbo contra mi cama agarrándome  por las muñecas.

-¡NO! ¿Que estas haciendo? suéltame- comienzo a llorar, tengo mucho miedo y no se que hacer-¡PAPÁ AYÚDAME!- grito fuerte pero el no viene y tío Greg me tapa la boca con su mano.

-Cállate niña, el no vendrá, esta ahogado en alcohol, no sabrá lo que paso, tu no dirás nada- comenzó a tocarme, subiendo mi falda para luego desabotonar su pantalón.

ayúdenme por favor.

...

-Hadalise ¿Donde estas?- Grita Greg desde la planta baja, estoy escondida en el viejo cuarto de Lilybeth, no me encontrara, él no entrara aquí.

-Hadalise, no me hagas buscarte, sera mas difícil para ti- me abrazo mas fuerte a mis pierdas, papá lo ha dejado cuidándome, apenas se fue, he corrido a esconderme.

Siento como se abre la puerta, cierro mis ojos con fuerza, como si eso me hiciera desaparecer.

-¿Hada?- aguanto la respiración, pero es en vano - Oh! aquí estabas linda- dice al abrir el armario, encontrándome pegada a la pared, jalandome del brazo.

-Suéltame- digo aguantando un sollozo

-nada de eso Hada, hoy fue un día duro en el trabajo y me ayudaras a relajarme

-Por favor, no me hagas nada- digo tratando de hacerlo reaccionar

-Oh! claro que te haré algo, y te gusta.