El ser sin alma

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Debido a cuestiones de seguridad llamaremos al chico de nuestra historia Tommy, pues Bien, Tommy había ingresado ese año a estudiar en un pequeño colegio particular, el corazón le decía que en el nuevo colegio seria todo diferente y por ende esperaba que lo tratasen mejor a como lo habían hecho otros colegios donde había estudiado, una cosa era cierta en ahí lo tratarían muy, muy diferentemente.

Aunque los primeros días como era lógico todos trataban de estar lo mejor presentables y corteses posibles, pues nadie conocía a nadie y Tommy creyó que en aquel lugar seria al fin feliz ya que todos le saludaban educadamente, incluso hasta las chicas mas guapas y bonitas siempre le dirigían la palabra con una sonrisa algo tímida, pero las semanas pasaban y pronto todos empezaron a hacer amistad con alguien de su preferencia.

Poco a poco Tommy empezó a quedarse solo otra vez, pues ya todos se daban perfecta cuenta de que él era, por decirlo así, el perfecto ejemplo de un Nerd auténtico, y por lo tanto una presa perfecta de las bromas de los mas populares y (ya que no habían más Nerds en aquel colegio) de los no tan populares también.

Con el paso del tiempo todas esas bromas ya empezaban a hacer enfadar a Tommy quien en un principio las tomaba a chiste pero ya se estaba cansando, hasta que un día no pudo resistir más y decidió encarar al más popular de toda esa partida de abusivos.

Eduardo, que así se llamaba el chico mas popular de la escuela lo veía con un gesto de desprecio mientras Tommy le hacia un lista de las cosas que le desagradaba que le hicieran y donde les advertía que no le molestasen más, a lo que Eduardo le respondió con un empujón cual ayudado por el pie de otro de esos insoportables chicos hizo perder el equilibrio a Tommy y lo mando de lleno al suelo, todos ellos reían llenos de gracia incluso las chicas que encontraban eso muy gracioso.

Tommy no lo soportó más y en ese momento sucedió algo que empezó a cambiar su vida de una manera irreversible, el carácter siempre tímido y amable de Tommy empezó a expresar manifestaciones de ira, una rabia tan grande y desquiciante que reemplazó a su raciocinio y le hizo actuar por instinto.

-Te voy a matar infeliz... eres hombre muerto y eso te lo juro- fue lo poco que le alcanzaron a oír el resto de sus compañeros pues en ese instante Tommy como un rayo tomó a Eduardo por el cuello de la chaqueta y para sorpresa de todos lo elevo por el aire a un metro de las cabezas de todos, para luego estrellarlo violentamente contra el suelo y comenzar a golpearlo con toda la fuerza que sus brazos le permitían.

-¡Ya basta desgraciado!-Le grito desesperadamente Robert, el mejor amigo de Eduardo y compañero de diabluras, en especial si se trataba de Tommy, quien lanzándose sobre el agresor de su amigo trato de quitárselo de encima pero era tanto como mover una pared de ladrillos.

-Te dije que pares pequeño imbécil- gritó una vez más Robert al tiempo que le propinaba un puntapié en las costillas de Tommy quien al sentir el dolor dejó de golpear repentinamente a Eduardo y lentamente se incorporó con la mirada aterradoramente clavada en los ojos de Robert quien por primera vez dejó de ver a Tommy como a un juguete para golpear y empezó a tenerle mucho miedo.

-Y que haremos ahora contigo Robertito- susurraba Tommy al tiempo que una expresión nueva de furia invadía su rostro.
-No te acerques más te lo advierto, no te acerques mas a mi, por favor- pedía Robert, con un tono que parecía próximo al llanto-por favor, tranquilízate-
Pero cuando Tommy se aprestaba a lanzarse sobre su nueva presa Eduardo se incorporó lleno de sangre en toda la cara y se lanzó contra Tommy por la espalda pero éste lo rechazó con un codazo en la boca del estómago lo cual hizo que Eduardo se doblase como una hoja de papel por la mitad.

-Que rayos pasa aquí- Era el director que había visto todo el cual, avalado por la acusación de todos los compañeros de estudios tuvo motivo suficiente para castigar físicamente a Tommy, el cual llorando más por la ira de aquella última humillación que por el castigo del director se fue a su casa expulsado por tres semanas del colegio, al llegar a casa todavía quedaba la cólera de su padre, el cual ya se había enterado de todo por una llamada telefónica que le hizo el mismo director.

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