Mi Vida Sobrenatural Llega La Magia

Capítulo 14. La primera Amenaza

Arístides.

Estoy en un lugar oscuro, siento una mano tomando con fuerza la mía, percibo su aroma y su esencia, pero la oscuridad es tan densa que creo que puedo palparla, solo escucho múltiples respiraciones a mi alrededor, intento hablar y no salen las palabras de mi boca; un estruendo rompe el silencio, una voz potente y macabra resuena en todo el lugar.

"Piensan que todo será fácil, creen que la oscuridad se doblegara contra ustedes jóvenes e inexpertos Minister criados por escoria humana, ustedes no son nada comparados conmigo, yo soy su destructor y su mayor pesadilla, soy el hechicero más grande que el universo ha concebido, mi nombre es sinónimo de miedo y grandeza, me encargare de destruirlos uno por uno, doblegare sus espíritus y hare añicos su cuerpo, me pedirán clemencia para que termine su miserable existencia con rapidez, mis soldados de la oscuridad se encargaran de destruir todo lo que puedan llegar a amar, cometen un error pensando que el amor es más fuerte que el odio y la maldad, pero están equivocados, yo les demostrare a ustedes lo que es el poder real, pronto nos encontraremos de frente en el campo de batalla y no será una reunión para nada amistosa, cada que escuchen el nombre de Catistimes, temblaran y desearan nunca haber descubierto sus poderes"

Despertamos al mismo tiempo, sobresaltados, sudados y asustados, escuché pasos en el pasillo y salí volando de la cama con Philiph a mi espalda, vi como Jasper estaba a punto de tocar mi puerta cuando la abrí.

—Se está haciendo más poderoso, la oscuridad se está fortaleciendo— fue lo único que salió de su boca.

Jasper

—Nos amenazó con que destruiría todo a su paso con tal de hacernos daño, se está haciendo demasiado fuerte, la oscuridad era absoluta, no podíamos movernos o decir nada, no podíamos ni siquiera acceder a nuestra magia— la cara de Angus era inexpresiva mientras le hacía un resumen de lo que decía la visión, estábamos todos sentados en mi alcoba con los nervios de punta.

—Esto era una amenaza para amedrentarlos, a este nivel esta aún demasiado débil como para regresar a su forma física, requiere de varios años para poder regenerarse por completo, pero su amenaza no deja de ser menos cierta, debemos mantenernos alerta por si sus secuaces intentan atacarnos y esto prioriza aún más la búsqueda de los demás Minister— dijo Rosy con tono decidido —Estuve pensando que sería una buena opción que Philiph y Arístides se muden a Londres, ya que debemos estar juntos para protegernos mejor las espaldas unos a otros, considero que la mejor forma de hacerlo es haciendo que sus padres reciban ofertas de trabajo en la ciudad que no puedan rechazar— ambos ángeles la miraron y asintieron sin darle muchas vueltas al asunto —No se diga más, comenzare el proceso— salió de la habitación con el teléfono en mano.

Cuando Rosy salió de la recamara todos nos quedamos en un silencio bastante tenebroso —Tenemos que comenzar con el entrenamiento intensivo, están a solo a meses de mudarse a Adernon y necesito que en el momento que crucen ese portal sean buenos luchadores no solo con sus poderes, también maestros de la lucha cuerpo a cuerpo— eso nos tomó fuera de base —Antes que reclamen, esto es importante porque podría haber situaciones en las que no puedan usar magia ya sea por la locación en la que estén o porque no sea seguro para ustedes utilizar sus poderes, vale la pena recalcar que ya sus cuerpos se saben todas y cada una de las tácticas, solo hay que refrescarlas y actualizarlas— Angus esbozo una pequeña sonrisa.

La puerta se abrió y Rosy volvió a la recamara —Todo está arreglado— cerró la puerta tras de sí —Ya se hizo contacto con los padres de Philiph y con la madre de Arístides, se les hizo una oferta jugosa con múltiples beneficios incluyendo el pago de la colegiatura de sus hijos—

Angus asintió cambiando la sonrisa por un rostro un poco más pensativo, realmente es una persona bastante fuerte y en este tiempo que tengo conociéndolo sé que muy pocas cosas lo preocupan o lo alteran, quizás mi sospecha de que esto es más grande de lo que pienso, me da miedo no ser suficientemente fuerte para enfrentar lo que se avecina.