Secretos de una pasión

Capitulo 9

Es domingo y a pesar de que es el dia de la boda me despierto de muy buen humor. El sabado me disculpe con las chicas por irme del club sin avisar y les conte lo que paso. En la mañana fuimos a desayunar todos en familia y en la tarde recogimos los vestidos y fuimos al salon de belleza. Hoy vendran los estilistas para arreglarnos a todas.

Salgo de la cama y me cepillo los dientes. Luego bajo a desayunar encontrándome con todos abajo sentados en la mesa. Saludo a todos y me siento a comer tranquilamente. El ambiente esta tan relajado, yo que pensaba que estarían todos tensos, pero resultó ser que no.

Las chicas y yo subimos a mi cuarto a esperar a que lleguen los estilistas en lo que yo me doy una ducha. Hablamos por un rato, luego escucho como suena el timbre y se oyen pasos subiendo la escalera.

Entran tres mujeres y dos hombres.  Uno de los hombres se encargará de mi peinado y maquillaje. Las otras personas se encargarán de mis amigas, mi madre y mi futura suegra. Augusto, el estilista, se sitúa detrás de mí.

- Bueno linda,  que quieres para hoy? -  me pregunta sonriente.

- Quiero un moño flojo al costado y un maquillaje natural - le dije decidida. El vestido es muy llamativo y no quiero llamar demasiado la atención también por un maquillaje excesivo.

La habitación era un caos mucho spray por aquí y por allá. Nubes de polvo y colorete por todos lados. El sonido de la secadora y el olor a cabello caliente por las planchas y las tenazas. Debe sonar estresante pero, me da una sensación vigorizante.

Una hora y media después, todas estábamos maquilladas y peinadas. Mi madre y Alicia llevaban el pelo suelto ondulado y con ciertas decoraciones. Las damas tenían todas el mismo peinado, un moño alto en forma de flor.

Nos pusimos los vestidos. Hubo que ayudarme a ponerme el mio con mucho cuidado para a no arruinar mi peinado ni el maquillaje. Me pusieron el velo y la tiara y ya estaba lista.

Me mire al espejo y se me aguaron los ojos. Me veo preciosa y no puedo creer que no pueda compartir este momento con Joseph. El fue una persona muy importante y era con quien yo deseaba casarme.

Parpadeo rápido para no llorar y no estropear mi aspecto.

Bajamos al salón. Los hombres ya se habían ido a la iglesia. La limusina nos espera fuera de la casa. Salimos y entramos en ellla.

El trayecto a la iglesia se mae hace eterno. No puedo con los nervios. Una molestia se sitúa en mi estómago. Es insoportable.

No quiero casarme, no puedo, no lo quiero, no lo conosco, extraño demasiado a Joseph.

- Mamá, por favor no quiero hacer esto.

- Tranquila hermosa, todo va a salir bien. Solo son nervios.

Hago silencio por lo que queda del camino, ya que se puede hacer. El chófer se detiene enfrente de la iglesia, ya no hay marcha atrás. Me levanto de mi asiento. Voy al mini bar y me sirvo un vaso de whisky. Me lo bebo de un solo trago. Todos me miran alarmados. Los ignoro y salgo. La molestia en el estómago se aplaca un poco y se me van las náuseas.

La brisa bresca me da en la cara y suspiro. Sigo nerviosa. No me importa si es con un extraño o con el amor de mi vida. Una boda es una boda. Mi vida cambiará mucho despues de hoy. Y no estoy segura que querer que ese cambio venga.

Pienso hablar con los señores Hoult para que vengan con Aaron a vivir aqui, cerca de mi casa nueva. Pero eso es algo que haré despues de acoplarme al nuevo ambiente.

Las demás salen de la limusina y se situan detras mio. Mi padre y Arthur salen de la iglesia y vienen a recibirnos. Nos ponemos en una fila. Los padres de Roger van adelante. Luego va Leah, seguida de Jessica, Sophie y Cara. Después vamos mi padre y yo, y mi madre atrás.