La Hija De Daryl Dixon

Capitulo 9

Todos nos quedamos mirando alertados al escuchar explosiones tan cerca de nosotros.

-¡Muertos!-Gritan las personas, no entiendo que es lo que pasa, Pero lo que sea, es nuestra oportunidad de escapar.

Pateo la puerta una y otra vez intentando que se habrá, es inútil.

Todos ayudan de alguna forma, Noha está intentando romper la pared con algún invento suyo.

La puerta se abre por algún extraño desde afuera, la empujo para poder salir y lo primero que veo son caminantes. Antes de salir digo rápidamente

-Punto de encuentro, el túnel.

Todos asientes para luego salir. Empujo A los caminantes para hacerme paso en eso veo a una chica pelirroja usando mi arco. Corro hasta ella y la empujo con una patada en su estómago, le quito mi arco y el carcaj mientras ella es comida por los mordedores.

Un fuerte sonido de una bomba se produce próxima a la entrada. Mato los mordedores y personas que se me cruzan.

El chico rubio de la azotea que se reía de mí, se queda paralizado mirándome con terror.

-Vete al infierno hijo de puta-digo segundos antes de que una de mis flechas se entierre en su cráneo. 

Intento buscar a Noha con la mirada mientras apresuro mi paso a un lugar mas seguro, pero no lo encuentro, veo a Carl correr fuera de terminus pero no los sigo, luego iré, Ahora buscare a mi padre y a Noha

Me escondo detrás de un basurero metálico todo dañado para cubrir mis espaldas mientras ideo algún plan. Miro más allá de este con cautela sacando solo un poco mi cabeza por el lado. Las personas corren mientras los caminantes los atacan.

Disparo mi flecha a un Hombre quien tiene a una chica de más o menos la edad de Carl tomada del brazo a la fuerza, la Rubia a su lado grita. Corre en mi dirección  en un intento de escape, sin saber que yo me encontraba. Cuando me ve, da un pequeño salto e intenta alejarse, pero la detengo y la agacho, justo en ese momento balas caen en el contenedor.

-Gra-gracias-dice con voz temblorosa, me mira con sus ojos verdes inundados en una mezcla de miedo y pánico, sus respiración es agitada.

-¿trabajas aquí?-Mi voz es fría provocando mas temor en ella.

Me mira sin saber que decir, traga saliva nerviosa

-No, llegue ayer con mi hermano, mi novio y un grupo de personas. Estábamos en el camión "A"

-¿Segura?-ella asiente rápidamente

-Bien, ¿dónde están ellos?

-no lo sé, a los hombres se los llevaron y a nosotras nos iban a dejar a un cuarto, cuando una explosión se escuchó, Nos dejaron ahí mientras les disparaban a los caminantes, entonces escapamos.-intenta hablar lo mas prolijo que puede-Soy Beth

- No hay tiempo para presentaciones-sus mejillas se sonrojan- te ayudare a buscar a tu gente si me ayudas a buscar a mi padre-se le forma una pequeña sonrisa de alivio-pero si me llegas a traicionar, te matare de la peor forma que te puedes imaginar, será tan doloroso que vas a preferir morir siendo mordida por cientos de ellos a la vez-sus rostro se vuelve blanco del miedo, traga saliva con fuerzas antes de hablar

-N-no lo are-  los disparos y gritos desesperados continúan- ¿cómo es tu padre?

-Estatura media, cuerpo fornido, cabello castaño ni tan largo ni tan corto, ojos rasgados y azul. Creo que viste una chaqueta de cuero con alas de ángel.-intento ocultar la ansiosa que estoy de escuchar si lo ha visto o no.

-Si, un hombre con esas descripciones estaba en el camión "A " con nosotros. Dijo algo de buscar a su hija. Pero se lo llevaron con los otros al igual que su amigo, un asiático.

《El Chico que perseguí》 pienso de inmediato. Siento como mi corazón se acelera por la emoción de encontrarme a tan poca distancia de mi padre.

-Bien, vamos-Ella asiente, toma un cuchillo con sus temblorosas manos.

Corrimos y entramos, nos colamos a habitaciones, pero solo veo cadáveres y sangre.

Beth me grita para que entre con ella a una puerta roja, ingreso a la habitación. Al caminar veo a hombres desconocidos arrodillados con una venda en sus bocas y manos atadas, varios hombres de distintas edades se encuentran con la cabeza sangrando y el cuello cortado, su sangre cae en un recipiente grande de metal.

Un hombre con un bate de metal ensangrentado nos mira, saca su arma con rapidez, pero no la suficiente ya que mi flecha atraviesa su cráneo

-Jesús-corre la chica y desata a un hombre rubio de barba.

Este sonríe y la abraza. Ayudo a desatar pero mi padre no se encuentra, Recojo mi flecha, la limpio y la guardo en el carcaj.

-No, Ethan, ¡Ethan!, Por favor despierta, Bebe-comienza a llorar mientras abraza a un chico de su edad, muerto.

-Beth, hermanita, está muerto-dice Jesús muy triste mientras la aparta del cadáver que pertenecía a su difunto novio.

-No quiero ser insensible, pero debemos correr o moriremos aquí

Todos me miran con una expresión de confusión en sus rostros.

-¿Quién eres?-pregunta Jesús 

-Ella me salvo la vida-me defiende la rubia.

Un chico de cabello muy corto y nariz rota, probablemente por una pelea. Me analiza con el ceño fruncido, como si intentara recordar algo.

-Gracias por salvarla, en serio.-Me agradece su hermano, desvío a la vista hasta él, asiento y todos caminamos por las mujeres de su grupo y mi padre.