¿Puedes Amar Sin Lastimar? (Peeta x Gale)

Capítulo 8 "Sin palabras"

Mi última conversación con Gale fue el 14 de febrero, hace como tres semanas, ya es marzo y esa fue la última vez que lo vi desde entonces. Vaya que se esfuerza en venir. El final de la jornada de estudios del día de hoy es la que más odio: Actividades deportivas. No odio los deportes, aunque tampoco me gustan mucho, lo único que me desagrada es el deporte que nos asignaron a nuestro grupo, Karate. Solo espero y el día de hoy salga del instituto sin tener que arrastrarme.

Luego de una larga rutina de ejercicios agotadores, decido tomar un descanso. Para mi suerte el profesor no nos está viendo, con temor a equivocarme, y en serio que no lo hago. Diría que fue a comprarse una torta exageradamente grande de pavo con tiras de tocino y con mas tipo de carnes, dale una de esas a un indigente y con eso tendrá para todo el día.

Me reúno con Finnick a descansar y a tomar un poco de agua.

—Estoy agotado, todo el cuerpo me duele —Me queje.

—No recuerdo cuando fue la última vez que me había cansado tanto por hacer ejercicio.

—Lo bueno es que para tercer semestre ya no nos pueden poner Karate.

—Lo que más me fastidia de esto es que ese profesor solo te grita lo que tienes que hacer y luego le da un mordisco a una de sus tortas delante de nosotros y me da hambre cada que lo veo haciéndolo, podría jurarte que casi siento las gotitas de grasa en mi cara cuando mastica.

—Qué asco, de solo imaginarlo quiero vomitar. Mejor hablemos de otra cosa.

—Bien. Cuéntame algo de ti.

— ¿Que quieres saber?

—Ah, no lo sé, ¿Que te gusta hacer?

—Pues me gusta pintar, se me da muy bien. Ni siquiera tome clases, es un tipo de don natural. Cantar, mi voz es una combinación de grave y aguda, pero un poco más de la segunda. No me considero un gran cantante, aunque algunos dicen que lo hago bien. Leer, me tranquiliza mucho y me relaja, mis géneros favoritos son el misterio y un poco lo dramático. La actuación es un pasatiempo que me ayuda a disminuir el estrés que me da con la escuela, la casa, los problemas, etc. Pertenezco al club de teatro y también soy el capitán. Y finalmente, cocinar, es lo que me apasiona, cuando me gradúe de esta escuela pienso estudiar en la IAG, Instituto de Artes Gastronómicas.

—Vaya, eres todo un mundo en tu cabeza y me gustaría verte hacer alguna de esas cosas.

—Gracias —Sonreí—. ¿Y qué hay de ti?

—Bueno, a mi me gusta la música de género electrónico y rock. Como a ti, también me gusta leer, sobre todo terror y misterio. Me gustan los videojuegos. Y lo que más me gusta hacer es escribir, quiero ser escritor. Hacer poemas, publicar mi primer libro, volverme exitoso y reconocido por mi trabajo, aspiro ser un gran escritor cuando termine mis estudios aquí en este instituto, ese es mi sueño.

—Pues mas te vale que lo logres, porque yo quiero ser el primero en leer tu libro —Dije mientras le daba un golpecito en el brazo.

—Gracias Peeta, y digo lo mismo, cuando seas un gran cocinero, quiero ser el primero en probar tu comida, ¿De acuerdo?

—Sí, te lo prometo.

—Bueno, ya casi termina la hora mejor vayámonos ya.

Tomamos nuestras cosas y fuimos a los vestidores a cambiarnos la ropa deportiva. Esta era una de las partes que mas odiaba también, tener que ducharme y cambiarme de ropa delante de todos mis compañeros de clases. Es demasiado incomodo ver tantos cuerpos desnudos. Una de las tantas veces que miraba a Cato me provoco una erección. Y el día de hoy no fue una excepción. Como hay regaderas en cada parte de las paredes paralelas, el se tuvo que poner justamente en frente de mi, habiendo mas disponibles.