I promise to destroy (Junhyung Y Tú)

Capítulo 4

Poco a poco podía abrir los ojos. Veía borroso, no podía identificar su cara.

- ______tn, ¿Estás mejor?

- Solo podí menear la cabeza asintiendo.

Su voz era tan sensual...

Volví a notar que me vestía, su roce me hacía tener escalofríos, sus manos eran suaves y era muy cuidadoso. Terminó de vestirme, y me metió en la cama, tenía los ojos cerrados y no identificaba su cara ya que antes veía borroso. Sus brazos me rodeaban y volví a oler esa colonia suave, se sentía muy bien.

Cuando desperté a mi lado no había nadie, no habían fotos ni nada que me dijera quien era. Fui a la cocina y había una nota.

Buenos días  _____tn, espero que hayas dormido bien y te hayas recuperado, espero que te comas el desayuno que he preparado y que vuelvas a clase.

Miré el desayuno, tenía buena pinta, arroz, sopa y unos huevos revueltos.

Mi mochila con los libros estaban en la puerta de la entrada, mi ropa olía a suavizante, y no era el que usaba mi madre, así que él me lo habría lavado.

Estuve todo el día pensando en aquel chaval.

- _____tn, ¿Estás bien?. Me dijo Alba. ¿Quieres hablar?

- Sabés lo que me pasó ayer ¿Verdad? 

Asintió.

- ¿Quien era el chico que me ayudó?

- No lo se, solo se que se enfadó mucho y que les dio una lección y ahora a las que te hicieron eso estan fuera de la universidad.

- ¿¡Qué!?. Abrí los ojos lo más que pude.

- ______tn, se pasaron mucho.

- Lo sé. Necesito saber quien era el chaval.

- Lo intentaré averiguar.

Vino Doojoon y depositó un beso en los labios de Alba .

- Buenos días, cariño.

-Perdonar, que me he perdido...

- Ya te contaré...

- ¿De qué hablábais?. Se sentó al lado de Doojoon.

- De lo que pasó ayer, por alguna casualidad, ¿Conoces al que me ayudó?

- No.

- ¿Seguro?

- Seguro.

- Bueno chicos os dejo solos... Me voy a la biblioteca.

Me senté en mi rincón apartado del mundo, en esa zona de la biblioteca no venía nadie ya que los libros eran muy antiguos y no se utilizaban.

Un libro cayó al lado mio. Había una nota junto al libro, la abrí rápidamente.

Gracias por hacerme caso. Que pases una buena mañana. Ten cuidado.

Salí corriendo para ver  si lo veía y... nada. Cuando llegué a la parte donde estaban los libros más nuevos era difícil saber quien podía ser...

Esa semana se me pasó demasiado lento. Soñaba con esa voz y con que volvía a tocarme.

Llegó el fin de semana y otra de las fiestas privadas a las que solíamos ir fin de semana si, fin de semana no.

Eramos como unas 50 personas.

- ______tn, vuelves a jugar, esta vez no te quedaras encerrada en una fabrica.