El chico del metro

Parque de diversiones (2/3)

(Sin duda esta es la parte más larga😅)
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—¡Camina más rápido!— agarro la muñeca de Cristina y la jalo dentro del parque.

Dentro hay demasiada gente, la mayoría niños.

Busto con la mirada a Ethan y lo encuentro sentado en una banca hablando con alguien por teléfono. Está de espaldas así que no puede vernos.

Lleva puesta una polera ploma, unos jeans negros y unas zapatillas del mismo color. Como siempre sus lentes no dejan ver por completo esos hermosos ojos azules que tiene, su cabello lo lleva mojado y algo despeinado, pero igual le queda bien.

Todo le queda malditamente bien.

Camino hacia él con Cristina pisándome los talones.

—¿Está listo? No, aún no...— toco su hombro y se voltea — Te hablo más tarde... Sí, ¿por qué crees? Okay, chau.

Cuelga el celular y se levanta para saludarnos.

—¿Con quién hablabas?— Sí, lo sé, soy muy curiosa.

Ethan le dice algo con la mirada a Cristina, quien le contesta igual.

—Con...mi mamá. Ya sabes, siempre se preocupan.

Asiento con la cabeza, la mamá de Cris es igual.

—¿Y qué estamos esperando?— habla la antes nombrada— ¡Vamos a jugar!

Sonrío y vamos al primer juego. Carritos chocones.

Cada uno iba a subir a uno, pero sólo quedaban dos.

Me iba a sentar con Cris, pero me votó porque quería estar sola, así que tuve que sentarme con Ethan.

Algo incómodo a decir verdad.

Él conducía y yo sólo le indicaba a donde ir, o sea donde estaba Cristina para chocarla.

Luego de ese juego fuimos al barco pirata, es algo así como una hamaca gigante y tienes que agarrarte o sino te caes.

No le veo el chiste, pero le tocaba elegir a Cristina así que fuimos a esa.

¿Adivinen qué? Sí, otra vez estuve al lado de Ethan. Habían tres sitios, dos juntos y uno al frente. Cristina se fue corriendo a ese y nos pusimos en los que quedaban.

Pareciera que no quisiera estar junto a Ethan.

Terminando ese (casi me caigo de no ser porque Ethan me agarró del brazo), nos fuimos a unos cuatro más hasta que llegó el peor de todos. Bueno, para mí.

La montaña rusa.

Creo que tengo un trauma con ese juego.

Cristina trató de convencerme de subir pero Ethan le dijo que mejor no, si no quería no podían obligarme.

Subieron los dos y se sentaron juntos. Se me hizo un nudo en la garganta cuando Ethan le dijo algo en el oído a Cris y ella sonrío.

Preferí no verlos, me sigue  incomodando, así que fui a comprarme un helado.

Me senté en una banca y revisé mi teléfono, tenía un mensaje de un contacto desconocido, el cual decía:

"Te espero en una hora frente a los carros chocones. No te preocupes en buscarme, te darás cuenta ahí;).
Psdt: Te dije que faltaban pocos días"