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Epílogo

Querida Hana:

¿Hace cuánto fue qué pasó?

Sí, fue hace mucho tiempo que paso desde que tú te fuiste de mis brazos y ¿Sabes?

Aun siento que fue ayer cuando paso aquel terrible suceso de mi vida.

Déjame contarte que cada mañana, despierto con la misma pesadilla que me ha atormentado a lo largo de toda mi vida, incluso he tenido que incluir al psicólogo ¿Te imaginas eso?

¿Alguna vez te imaginaste que yo llegaría a esas medidas?

Han pasado 60 años desde que te fuiste, desde que no estás en mis brazos y desde que ya no volví a besar a ninguna mujer...

Sí, Hana Hayes fue lo mejor que me pudo pasar en toda mi vida, porque... Era la única chica que me podía sacar alguna sonrisa y no necesariamente que ella quisiera hacerme sentir mejor, sino con su propia personalidad me hacia sonreír como un perfecto idiota.

Desde que la conocí fue una de las mejores personas que pude haber conocido a lo largo de mi vida, desde que te conocí a los cinco años nunca deje de pensar en ti, soñaba como loco contigo.

Me encantaba verte todos los días con tus cabellos rubios cayéndote por el rostro, tapando una de las más hermosas sonrisas que pude haber visto alguna vez.Y cuando llegamos a ser novios fue una de las mejores cosas que me pudo pasar, me sentí el hombre más afortunado del mundo.

Pero... Toda aquella belleza termino.

¿Cómo fue que pasó?

Más bien...

¿Cómo fue que caí tan bajo?

¿Qué me paso por la mente cuando bese a aquella mujer?

Todos los días no me dejo culpar por tu muerte y no creo que nunca lo deje de hacer.

Porque yo fui el causante de todo, de todo el sufrimiento que pasaste en las últimas horas que estabas viva.

Yo fui el causante por el que tu estrella se marchito poco a poco del espacio.

Te merecías algo mejor, Hana, te merecías algo mejor que yo.

Te merecías a la mejor estrella que había en el universo y esa estrella no era yo...

No sabes cuanto me duele haberte dejado ir tan fácilmente .

No sabes cuanto me duele saber que yo nunca fui lo mejor para ti.

Pero te amo.

¡Sí!Aún te sigo amando y siempre te amaré.

Porque eras la razón de mi existir, la razón por la que cada mañana me paraba con la esperanza de sacarte una sonrisa.La razón de mi existencia.

Pero sé que ahora no sufres, porque sé que donde estás es hermoso ¡Allá es hermoso!

Porque también sé que tú nunca exististe, porque eras algo tan hermoso para estar en esté planeta.

Y sí, es cierto.

Tú no exististe...

Y yo tampoco existí.

Att: Chandler.