Respite | #FNAFHS

II. Porque quería verte.

Lo que había pasado la noche pasada había sido... Raro.

Al momento de proteger a su amiga de esa cosa Bon estaba más o menos preparado para recibir el impacto y se quedo parado como idiota unos 2 minutos. Al abrir los ojos vio lo que efectivamente era un niño que lo miraba fijamente y también, por más loco que suene, pronunció el nombre del chico peli-azul para mágicamente desaparecer.

«— ¡Bon! ¡Toy Chica! ¿Por qué tardaron tanto?—preguntó su amiga Mangle a los dos chicos que recién salían del viejo local.

Tanto Toy Chica como Bon seguían aturdidos y fuera de la realidad por el pedazo de susto que se habían llevado adentro del edificio. Entonces finalmente Bon levantó su vista al frente viendo a todos sus amigos y habló.

— ¡Jaja! Muy gracioso chicos, si que me dieron un susto.

Todos los presentes se les quedaba viendo raro a Bon, no sabían de lo que hablaba.

— ¿De qué hablas Bon? —preguntó Springtrap algo confundido.»

Al menos eso recordaba el chico de piel morena una y otra vez. Pensó que alguno de sus amigos quisieron hacer una buena broma para darse unas risas pero... No.

Si no hubiese sido Bon fácilmente la persona en su lugar habría jurado ver un fantasma y demás, pero ese no es el caso. El chico de ojos verde se creía cualquier cosa menos "lo paranormal". Él estaba casi seguro de que algún listo vino a darle el susto o sus compañeros le estaban viendo la cara de tonto. Todo menos aquello.

Eran las casi 11 de la mañana, era sábado y por obvias razones Bon no iba a la escuela ese día. Estaba acostado en su cama con la vista en el techo casi sin moverse. No estaba en sus planes levantarse aún hasta que su estómago exclamo hambre cuando la barriga del chico empezó a rugir.

—... Tengo hambre.

Se levanto lenta y perezosamente de su cama hacía la cocina. Su padre no se encontraba en casa pero Bon lo único que pensaba era en comida.

Llegó a la cocina, tomo leche de refrigerador y sus cereal marca Acme [1] con sabor a frutas variadas y lo sirvió en el plato. Entonces salió de la cocina para ir al comedor y sentarse para poder comer de una buena vez.

—Se te olvido ir por tu cuchara—el niño le pasó la cuchara a Bon para que este pudiera comer a gusto.

—Gracias.

—De nada.

...

Bon volteó lentamente para encontrarse con un niño de cabellos morados mirándolo fijamente parado sin más. Que bonita manera de empezar al día ¿No? Pegando un grito de miedo mientras te caías al suelo por tener un chiquillo intruso en tu casa.

—¿Q-q-quién eres? ¿Qué haces aquí?

—¿Yo?

—¿Y QUIÉN MÁS?

—... Bueno, yo soy Bonnie y... Vine a verte Bon.

—...—Bon seguía sin moverse del suelo procesando lo que le había dicho el infante. Entonces fue cuando lo analizo con la vista para encontrarse que en el estómago del niño tenía una enorme herida que sangraba abundantemente que resbalaba por una de sus piernas.—¡Oh dios mio! ¿Qué te sucedió? E-estas sangrando.

— ¡Ah!... ¿Te refieres a esto? ¡Jaja! Es gracioso por que si estuviera vivo lo primero que te diría es que soy inmune a los golpes pero...

—¡Wow! Espera ¿A qué te refieres con "si estuviera vivo"? No andes bromeando niño.

—Pero es verdad, me apuñalaron muchas veces hasta morir...—el pequeño de cabellos largos apunto a su estómago justo en la horrible herida.—Si lo ves bien puedes notar las marcas de la cuchilla, cuando estoy aburrido me pongo a contarlas.

La cara de Bon era para foto. Todavía no se creía lo que estaba viendo y escuchando.

—E-eso significa que tú... Tú eres... Un fantasma o algo así...

—Umm... Pues sí, aun que hubiera preferido convertirme en un zombie ¿Sabes? Por eso no pude tocar el timbre, mi mano traspaso la pared, Je Je Je.

Bon todavía no se lo podía creer. Se levantó del frío suelo y caminó hacía el "fantasma", trató de tocarlo pero la mano atravesó el cuerpo. El peli-azul sintió ese mismo escalofrío que había sentido ayer en la noche mientras se abrochaba las cintas de los zapatos. Su piel se erizó y sacó rápidamente la mano.

—B-Bonnie... ¿Cierto?

—Sí.

—... Yo... ¿Podrías explicarme todo desde el principio?

🔹

Este era Bonnie. Él cuando estaba vivo era un niño muy alegre, aun que siempre le hacían bullying en su escuela, su sonrisa permanecía brillante todos los días. Su pizzería favorita sin duda era "Fredbear Family Dinner", una pizzería que poco a poco iba alcanzando su fama por su peculiar show de animales robóticos que para ese entonces era tecnología super moderna y entretenida para los niños.

Un día mientras, Bonnie veía el show que estaban montando los animatronicos feliz. Según él, su animal favorito era el conejo morado que tocaba la guitarra eléctrica. Sin duda alguna, este fue una inspiración para el niño de ojos rojos para prometerse a si mismo que algún día aprendería a tocar guitarra.

Uno de los animales dorados se acercó a Bonnie ofreciéndole un poco de pastel. Sin darse cuenta Bonnie lentamente se alejaba de la gente e iba siguiendo al oso color dorado, llevándose la sorpresa de que dentro del traje estaba un hombre junto con un arma blanca.

Una muerte dolorosa fue lo que sucedió ese día, y desde ese mismo día el espíritu del niño se la vivía matando a cualquier persona que entraba al local.

Al menos eso es todo el resumen de la historia de Bonnie, contada por el mismo y sin dar muchos detalles. Aún así, Bon sintió una impotencia enorme al escuchar cada palabra que salía de la boca del peli-morado, pero todavía quedaba una duda.

—Dices que matabas a cualquiera que entrara allí ¿Verdad?—dijo Bon.

—Pues sí.

—¿Entonces por qué no me mataste?

El chiquillo se quedó pensando un instante para finalmente soltarlo.

—Porque quería verte.

🔹

...Holis :v

Aviso desde ahorita que los capítulos no serán largos, y lo intentó pero es que I can't :'V
También tengo que decir que estuve 5 días sin internet y fueron lo peores 5 días de mi vida... Pero volví Bitches Bv

Bueno, agradezco los comentarios anteriores :') en su momento no los respondí pero pueh ya ni modo :''''V

Sin más que decir, Chao~~~~~

[1] No se me ocurrió otra cosa prro \(>:v)/