Excitada.

Cap 2.

Estaba en la cocina terminando de preparar el desayuno, y cuando sacaba el zumo de naranja escuché pisadas viniendo hacia aquí pensaba que era Giselle una de las chicas que se encargan de toda la casa pero me sorprendí al escuchar su voz.- Hola.- Se nota que recién se había levantado.

- Buenos días, Preciosa.- Le sonreí dulcemente mientras le colocaba el desayuno enfrente de ella.- Me arruinaste mis planes.

Arrugo su ceño y habló.- Porque lo dices?

- Te levantaste antes y te iba a llevar el desayuno a la cama.- Refunfuñe como niño pequeño, vi en ella sus mejillas sonrojadas.

- Creo que lolamento y gracias.- Me sonrió.

Me senté a comer mi delicioso muffin de vainilla, mis tostadas con mermelada de durazno y mi zumo de naranja, la veía y cada vez que lo hacia me parecía más hermosa... Ahora mirándola detalladamente sólo trae la remera que le coloque ayer le queda linda y sexi, me mordi el labio inconscientemente.

Tosio llamando mi atención y devolviendome a la realidad.- Porque desperté en una habitacion que no es la mía? Porque traigo puesta una remera, Que creo que es tuya? Tuvimos Sexo? Porque no recuerdo nada?

- Vale son demasiada... Umm haber... Despertaste en la habitación de invitados, anoche estabas demasiado borracha entonces me ofreci para llevarte a casa tu me dijiste específicamente Si llevame unicornio volador te pregunte la direccion pero estabas demasiado cansada así que decidí traerte aquí. Traes puesta mi remera porque tu vestido olía asquerosamente, anoche pedí que hoy lo pusieran a lavar temprano. No, no tuvimos sexo, yo no me aprovechó de borrachas o simplemente de chicas que su mente estén en otro lugar. Capaz que no recuerdes nada porque como te habrás dado cuenta anoche te enbriagaste al tope.

Termine mi relato tragando un sorbo de zumo.

- Y porque No tuvimos sexo? Que no te gustó o que?- Preguntó entre ofendida y desanimado.

No sólo me gusta, me encantas.- Pensaba Justin.

- Como dije anteriormente no me aprovechó de chicas idas de la realidad.- Mi semblante cambio bruscamente, no me gustaba que pensarán que yo soy de esos hombres que se aprovechan de la situación.

- Que lástima.- Pasó uno de sus dedos por la mermelada.... Me está provocando!!

Se levantó de su asiento, cogió todo lo que ocupaba su desayuno lo dejo en el lava-vajilla, se acercó hasta mi lugar, tomó lo mío, antes de ir a dejarlo para lavar me miró, se mordió el labio, Lugo pasó con la punta de su lengua por ellos y sonrió con picardía.

No contuve mis acciones, me levanté me giré en su dirección (Ya que estaba sentado a espalda del lava-vajilla), se había puesto a enjugar los trastes, mi remera le llegaba un poco más de la mitad del muslo. Me acerqué a ella y coloque mis manos en su cintura, hice nos pegaramos lo más posible.

- Me estás provocando, muñeca?- Susurre en su oído con la voz ronca, mordi si lóbulo.

Mis manos recorrían un camino imaginario en su estómago, la punta de mis dedos rozaban sus pechos, empecé a hacer movimientos con mi cadera hacia adelante y atrás muy suaves, sus piernas comenzaron a temblar con mis vaivén.

- Ummm... Pu-uede ser...- Lo disfrutaba, pero conmigo no se juega. Me separe de ella rápidamente.

- GISELLE!!- Grité asustando a Ana, su cara había cambiado rotundamente a una confundida y enojada.

- Si, Señor?- Preguntó cuando llegó trato de descifrar lo que estaba sucediendo.

- Te e dicho mil veces que me llames Justin. Y quería saber si la ropa de la señorita ya está lista.

- Lolamento, Justin, y no, todavía falta que se seque. Con su permiso debo de seguir con mi trabajo.- Despues de una afirmacion por parte mía se marchó sin decir más.

- Haber si entiendo, primero me excitas y luego quieres que me marché.- Estaba enfadada se le notaba.- Sabes que lo mejor sera que me marche.

Solté una carcajada, ella no podrá irse fácilmente ya que mi casa que en un barrio privado algo alejado de la ciudad y no tiene transporte.

Salió de la cocina, la segui y nos guió hasta la habitación de huéspedes, quiso cerrar la puerta para así no dejarme entrar pero es obvio tengo más fuerza y la habri.

- Quiero mi ropa.- Se cruzó de brazo y se sentó en la cama.

- Esta húmeda. Además no tienes en que irte, esta casa está a más de 5km fuera de la ciudad.- Explique tratando que entrará en razón.

- Eres un mentiroso, era cierto que te aprovechaste de mi...- No la dejé terminar ya que la tumbe en la cama conmigo en cima suyo sin llegar a aplastarla, cogí sus muñecas y las lleve a la altura de su cabeza.

- No vuelvas a decir que pude haberme aprovechado de ti, tenía una posibilidad de violarte pero yo no soy asi.- Estaba enfadado, de verdad este tema me hace querer golpear a alguien. Me tranquilice para hablar más tranquilos.- Mira hagamos un trato, espera a que se seque del todo tu ropa, te vas a bañar, después te pondrás algo de ropa que te prestare, y luego a la tarde te llevo a casa, te va?

- Vale. E escuchado todo lo que as dicho pero tengo una condición.- Sonrio con picardía en sus ojos.

- Cual?

- Mira, todo el tiempo que hablabas sólo miraba tus labios y me tentaron, así que quiero que me beses.- Sonrio inocentemente.

Sin pensarlo dos veces atrape sus labios con los míos, disfrutaba del compás en el que se movian, pasé la punta de mi lengua por ellos pidiendo acceso, abrío la boca dándome paso, mi lengua recorrió cada lugar de su boca, cada vez aumentaba más y más la intensidad, sus manos se colocaron en mi cuello atrallendome más hacia ella, mis manos recorrieron desde su cintura hasta colocarse debajo de su trasero apretandolo con fuerza haciendo que gimiera.

Podría acostumbrarme a esto.- Sonreí ante mis ideas.

¿An podría llegar a ser mi próxima BabyGirl? Cuando la conoci senti algo punzandome el pecho, algo que tocaba mi corazón y lo llenaba de alegría... Y de amor.