CRONICAS DE GAIA

Capitulo 2: La Diosa Gaia y mi escencia

Todo estaba oscuro, la verdad llamarla oscuridad sería poco pues el sentimiento era de vacío, sabía que estaba allí pero ninguno de mis sentidos lo sentía, todo era tan confuso que estaba haciendo aquí, hace unos segundos estaba en el templo.

De repente un sentimiento nostálgico me invadió, imágenes comenzaron a aparecer en todas direcciones, sentía felicidad, dolor, tristeza y cualquier otro sentimiento que puedas pensar todas esas imágenes que estaban pasando eran de mi anterior vida entrando en todo mi ser y subconsciente, se que suena extraño pero imagina recordar todos tus momentos felices, triste y dolorosos al mismo tiempo, me sorprende que podamos soportar todo este flujo de información.

--la verdad había escuchado que el cerebro tiene un poder infinito que aún desconocemos vi varios documentales del mismo-- dije pensando en voz alta.

--Espera espera que acabo de decir?-- dije conmocionado.

Sin darme de cuenta comencé a desesperarme no encontraba lógica en las imágenes que veía, el nuevo conocimiento que obtenía no se parecía a nada de lo que hubiera visto en la actualidad. Veía estructuras gigantes le decían rascacielos, carruajes que no eran impulsados por magia o animales sino por otros medios, muñecos de metal que se le conocían como robots haciendo tareas de distintas índoles; no podía asociar nada pero las imágenes y los sentimientos no cesaron, veía a los que fueron mis padres y vi como crecía bajo su tutela y enseñanza, me parecía extremadamente gracioso en como mis anteriores padre se parecían a mis padres actuales en su manera de criarme.

poco a poco las imágenes cesaron y todo se envolvía en una densa oscuridad nuevamente, cuando pensé que todo estaba terminando todo se iluminó y estaba en una pequeña isla dentro de un lago, en la isla solo estaba un inmenso árbol que puedo decir era muy antiguo debido a su grosor y tamaño.

Intentaba moverme pero no lo conseguí, ni siquiera podía mover alguna de mis extremidades.

-- si esto es parte del ritual parece demasiado real --dije para poder escuchar mi voz

Al poco tiempo una brisa sopló y movió cada una de las hojas del árbol, hojas caigan y daban un espectáculo natural con una belleza que solo la naturaleza puede ofrecer, le daba gracias a la Diosa Gaia por estar tumbado en la posición correcta.

De pronto del baile que ofrecían las hojas al caer, se formó un pequeño remolino y apareció la figura de una mujer esbelta y exuberante cubierta por las hojas del árbol, tenía unos ojos de color ámbar y un cabello del color del trigo. Me miraba de la misma forma en que mira una madre a su hijo, es la misma expresión de amor que mi madre.

--bienvenido a mi hogar pequeño Allen --dijo la mujer mientras descendía lentamente al suelo y se me acercaba.
--gracias, pero disculpa quien eres? Y podrías ayudarme es que no me puedo mover no siento ninguna parte de mi cuerpo --dije mientras sentía que me ruborizaba por la belleza de aquella mujer que se me aproximaba cada vez más.

-Claro mi pequeño déjame ayudarte -- dijo mientras acercaba sus manos a mi rostro.

--creo que deberías saberlo o presentirlo, Yo soy Gaia la Madre de la tierra y toda su vida --dijo con una voz tan dulce que pudieran haberla utilizado como endulzante.

Sus manos hicieron contacto conmigo pero no fue lo que esperaba, no estaba sosteniendo mi cabeza, lo que sostenía era todo mi cuerpo, como esto era posible? Porque siento que me a sostenido completamente?, porque siento que sus manos están en algo gelatinoso. Poco a poco con cada pregunta me estaba desesperando más y más, estuve a punto de entrar en pánico y gritar. Pero en ese instante escuche una voz dulce como la miel.

--Tranquilo pequeño Allen, yo te he invocado aquí. Quiero hablar contigo he querido hablar contigo desde hace mucho tiempo pero tuve que esperar hasta el momento que realizarás el ritual --dijo la Diosa Gaia en forma de susurro.

Cuando estaba a punto de realizar la pregunta más obvia de todas, La Diosa Gaia continuó hablando.

--Se que estas confundido y permite tratar de explicarte todo lo mejor posible -- decía la Diosa mientras colocaba su dedo índice cerca de la boca, con una mirada perdida que intuía que estaba pensando en como explicar lo que sucedía.

Me deleitaba el simple hecho de mirarla, no podía creer lo que estaba pasando. Bueno todavía puede ser un sueño causado por el ritual me decía a mis adentros y pensamientos llegaban a mi mente a hasta que nuevamente su voz me sacó del trance.

-- Te encuentras en mi reino, digamos que es otro plano astral diferente a tu mundo pero no son dos cosas diferentes, actualmente te encuentras en la forma de tu esencia por eso te ves como un pequeño slime eres el primero en tener un escencia de ese tipo -- decía enérgicamente la Diosa después de haber pensado unos segundos.

Pero yo no había escuchado más nada después que dijo que mi esencia es un slime, UN SLIME!!!! No podía creérmelo no había escuchado nunca de nadie con ese tipo de esencia y normalmente las esencia son tan fuertes como a lo que representan en el caso de las escencia tipo bestias y el slime era del tipo más débil, las personas suelen utilizarlos como depósitos de lo que no quieren ya que absorben todo, no quería creerlo mi sueño de poder usar magia y llegar a ser en un guerrero como mi padre se desvanecieron y no por más que por las palabras de la Diosa Gaia.

Mientras divagaba la Diosa seguía hablando enérgicamente.

-- Y eres de color un hermoso color negro pareces una pequeña piedra de onix, eso también es algo a tu favor como podrás ver y ahora el por qué estás.. --Decía la Diosa pero la interrumpí en ese instante.

--A mi favor? Que puede tener a mi favor ser un slime?-- dije en tono depresivo

--acaso no me has escuchado todo este tiempo hablando te y diciendo lo contenta que me encontraba por que tuvieras esa clase de esencia -- dijo la Diosa con un cara que aunque intentaba ponerla para demostrar que estaba Enojada a mi parecer no lo consiguió.

Para ser una Diosa se comportaba como una adolescente de mi anterior mundo o es lo que sentía, todavía no podía encontrar el significado a todo lo que sabía ahora.

--Déjame resumirlo para que entiendas un poco, los slime son una entidad pura están hechos totalmente del Maná que brota de la tierra por ser una entidad pura y su color representa en su totalidad al elemento al cual tienen mejor afinidad y no diré más nada sobre tu esencia por no haberme prestado atención jum --decía nuevamente intentando poner su cara de enojado.

-- Como podrás haber deducido ya por obtener fragmentos y conocimientos de tu anterior vida no pertenencias a este mundo anteriormente hace 16 años te elegí como mi representante y con mi poder divino traje tu alma a este plano para poder que me ayudaras -- decía la Diosa.

Estaba perplejo volví a pensar que todo esto era una especie de sueño y luego la interrumpí mientras hablaba.

--elegirme a mi porque? Representarla? -- pregunté con un poco de miedo y emoción a la vez.

--el por qué fuiste tu, en mi búsqueda te encontré y te observé, te vi como eres y qué querías representar vi todo tu trabajo duro y toda tu motivación pero nunca dejaste de ser tu mismo, nunca te avergonzó lo distinto que fueras de los demás y eso te hacía especial eres y fuiste una persona pura que no dejarás que otros te indiquen cómo vivir ni tu voluntad temblaba cuando te topabas con obstáculos que parecían imposibles por eso te elegí --decía con el mismo tono con el que me saludo cuando nos vimos por primera vez, eran las palabras serias de una Diosa.

La Diosa no me dio tiempo de decir o contestar algo y siguió hablando

-- Para que entiendas lo que significa representarme primero tienes que conocer la historia de la guerra de los astro -- decía con calma la Diosa

Escuchaba con mucha atención pero su expresión me indicaba que era algo realmente importante pero de repente el hermoso paisaje comenzó a oscurecerse era un cielo sin lunas ni estrellas, si no hubiera sido por el árbol que sus hojas emitían un pequeño brillo dorado y la Diosa que irradiaba una majestuosa luz no hubiera podido ver lo que pasaba alrededor, el cielo comenzaba a agrietarse y los árboles a la lejana parecían que morían, esto no duró más de un segundo pero el miedo inexplicable que recorría mi ser fue demasiado grande.

--Allen debemos separarnos ahora debemos encontrarnos luego para hacerlo debe ir a las montañas Purplerain y encontrar el oasis donde el atardecer cambie de color --decía la Diosa mientras tomaba una rama del gran árbol y lo transformaba en algo parecido a un ojo y un punto que parecía un corcho.

Los acerco lentamente a lo que debía ser mi rostro, sentí un ardor en mi ojo izquierdo y el oído derecho, mientras yo soportaba un inmenso dolor Escuchaba a la Diosa hablar.

--Te doy el ojo y el oído de Gaia para que te permitan ver más allá de las imágenes y escuchar más allá las palabras. -- dijo la Diosa mientras me baja al suela y comenzaba a Recitar un cántico.

Solo pude escuchar un hasta luego, a lo lejos.
__________________________

--Ahhhhhhhhh unf unf -- grite no recordaba nada después de ponerme a rezar, me dolía mucho la cabeza y estaba muy sudado, a los pocos segundos me di cuenta que estaba recostado de una pequeña cama en un cuarto.

--Allen me alegro que despertarás, no sabíamos qué ha pasado es primera vez que vemos un acontecimiento así --dijo el Obispo Pablo en un tono preocupado aunque intentando aparentar serenidad.

La cabeza me seguía doliendo pero el dolor poco a poco iba bajando

--Allen, Allen, ALLEN XIALONG RESPÓNDEME CUANDO TE HABLO--dijo mi madre con ese tono particular que tienen las madres cuando están medio enojadas y preocupadas a la vez.

Cuando regresé en mí mismo, mis ojos estaban enfocando a mi madre que se encontraba frente mi con una cara de preocupación que solo una madre puede poner cuando a su hijo le pasa algo.

Pero yo estaba pensando en todo lo que había pasado, La Diosa, mi vida pasada y mi patética esencia estaba empezando a recordar, sentía ansiedad y veía a mi madre preocupado.

me sentía agotado, sentía que iba a desmayarme en cualquier momento, intentaba pensar en que decirle a mi madre pero de mi boca salieron las siguientes palabras.

--Madre, no soy de este mundo.. --esas fueron mis últimas palabras el día de mi cumpleaños ya que volví a caer inconsciente.