El sonido de la lluvia chocando contra el cristal de la ventana logra, de alguna forma, tranquilizarme. El sonido de la ciudad apenas es audible gracias a los pequeños y constantes golpeteos.
Me siento, de alguna manera inexplicablemente, más relajada de lo que he estado en los últimos días.
Pero, aún no es tiempo.
No me siento lista, no lo estoy. No puedo salir al mundo, no puedo enfrentarlo, enfrentarlos.
Simplemente no.
No puedo hacerme a la idea de que tú ya no estás aquí, no estás y te necesito.
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Memories in the rain.
ContoAlgunos piensan que la soledad sólo nos trae dolor. Pero no es así, por lo menos para mi, es distinto, la soledad y la lluvia me hacen sentir mejor. Ahora que él se marchó. Esto es lo único que me queda. El sonido de la lluvia en el cristal y las l...