Recuerdo que corría el año... 2012 más o menos, cuando por primera vez conocí a la pandilla del señor G. En ese entonces, estaba n una curiosa etapa de auto-conocimiento. De autoconfianza también: estaba entre que sabía que podía lograr cosas imposibles y la negativa. Conociendo al sr. G también conocí al señor D. Ambos hablaban incoherencias para mi yo terrenal, entre portales, historias, y más tarde dimensiones como Terra. En algún momento dudé de sus palabras; me daban la impresión de que era tan verídico que se me hacía falso. Pero cada cosa que escuchaba, cada historia, etc. comenzó a cobrar sentido junto a mi intuición. Verán, si tienen buena memoria lectora, recordarán que en los primeros capítulos dije que nunca me sentí parte de ningún grupo, siempre fuera de este tiempo, que debería haber nacido antes, que era un lobo solitario en búsqueda de cobijo. Pero mi intuición me decía que no existía tal lugar acá, y más que eso; si no pertenezco aquí, ¿a donde pertenecía? ¿Porque me llamaron ermitaño?¿Y por que tenía la impresión de llevar extremadamente mucho tiempo buscando respuestas?
A fines del año pasado, sentí que iba a ocurrir un cambio en el mundo. Lo llevaba sintiendo mucho tiempo, y yo iba a ser el culpable. Resulta que el bueno de G, desde que nos conocimos, ha sido un monitor de mi estado energético. Hay mucha historia detrás, pero acortando, al juntarme con el y con otras personas despiertas, fui despertando poderes que no sabía que tenía, ni existían. Como un orbe que me permitía encontrar y copiar cualquier objeto que me viniese a la mente, ya sea de civilizaciones antiguas o la respuesta a una pregunta. La cosa es que a fines del año pasado, sentí las ganas de abrir y encontrarme nuevamente conmigo . mismo, con mi oscuridad sellada en lo profundo de mi corazón.
Cuál sería mi sorpresa cuando, de pronto, mire nuevamente la forma que tenía toda esa oscuridad que tenía, y tenía una forma femenina poco definida: era una especie de ente con una forma humanoide pero puramente energético, donde sus ojos portaban lo inexplicable y su boca más bien era un conjunto de dientes, donde adentro no había más que negro. Y ese ente me dijo 'siempre estaremos juntos, siempre seré tu último recurso' y junto con ello, me sentí fatal.
Empecé a sentirme mareado, como si no tuviese nada de energía, algo afiebrado, veía todo borroso, y para colmo de males estaba trabajando. Apenas si podía mantenerme en pie, si no fuese porque mi fuerza de voluntad me mantenía lucido y parado, sentía que podría morirme si no mantenía la consciencia.
Y la energía pura y magna que rodeaba a dicho orbe (por el cual, también, tiene su nombre la agencia Orb Sight: 'vision del orbe' o 'vision total') comenzó a fusionarse íntegramente con la mia, hasta que se volvio una sola.
Ya no había alter egos. No había un ser sabio que me guiara. Era un todo; luz, oscuridad. Era yo. Sin recuerdos de vidas pasadas, sin historia, sin nada. Pero estaba completo, estaba en el ahora.
*suspira* Lo curioso de todo esto es que si bien no recuerdo haber tenido historia, se que todo existe: está en una parte, aunque, como todas mis memorias actualmente, esta todo borroso. Como si el pasado, presente t futuro fuese uno. Como si el tiempo y el espacio no importara.
Y me dirían 'si tienes el poder como un dios, ¿por que no cambias tu vida?' Yo digo, no es tan fácil volverse un héroe de la noche a la mañana. No se como controlar mi poder, y tampoco tengo un guía ahora. Pero se que soy capaz de todo, aunque no pase siempre positivamente.
En fin.... Ser un humano prospecto a ser multidimensional no es fácil; créanme. He vivido tantas cosas que no terminaria nunca un libro, y sinceramente pienso que ya los tengo aburridos. Este ha sido un pequeño repaso, muchas gracias por leer.
//NdR: Este capítulo final va a dirigido a mis amigos cercanos, todos conectados con una realidad que la mayoría desconoce. Espero que les haya gustado.//
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Antes de Origen
Science Fiction(Parte del Universo Expandido de Orb Sight) 'Siempre fui alguien poco común y raro a los demás. Nunca destaqué, y menos a medida que crecía. No soy un chico lindo ni tengo chicas a mi haber. Y recibí este poder. Sigo sin ser un chico lindo sin chica...