MIS DEMONIOS

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Desde que hable con mi prima me sentía un poco mejor... Ya no tenia miedo ni ganas de cortarme... Pero algo nuevo nacía en mi mente.

Empezaba a escuchar voces diciendo que me alejara de ellos... A pedir que me lastimara... A que hiciera sufrir a los que me hacían daño.

No sabia que pasaba así que solo creí que era algo mínimo... Poco a poco solo me fui transformando en alguien muy diferente a quien era... Ya no quería hacer nada... No comía... Casi no dormía... Me la seguía pasando escuchando música... Era alguien completamente diferente... No sabia como empezó pero... Debía de hacer algo o seria peor.

En la escuela solo me sentaba en la butaca hasta que acabaran las clases... A veces solo me ponía a dibujar cosas "suicidas"... En uno de esos días en mi mente empezaron a surgir esas voces en mi cabeza diciéndome cada vez mas fuerte:

"Vamos mátalos"
"Ve como te tratan"
"Hablan de ti a tus espaldas"
Era horrible escuchar cada vez mas a esas voces... Me empezaba a volver loco... Solo quería dormir y dejar de escucharlas... Dejar de pensar en todo lo que me decían... Dejar de sufrir en este "infierno".

Seguí así por varios días hasta que necesite ayuda... Le hable a Nohemí... Quien me ayudaba en situaciones así... (Aparte que con el tiempo recurría mas a ella porque de cierta forma me empezaba a gustar)... Me explico que lo que tenia solo era parte de estrés y de no dormir bien... Me dijo que me relajara y que me cuidara.

Le tome la palabra y todo cambio por un leve tiempo... Hasta que una vez durmiendo se me aparecieron esas voces... Decían que eran mis demonios... Manifestaciones de mi alma corrompida y de mis desilusiones y que tan solo querían ayudarme a que dejara de sufrir... No sabia que responder... Solo me quede callado escuchándolos... De pronto todo se torno negro... No veía absolutamente nada... Solo escuchaba a esas voces decir que me ayudarían... Que me tranquilizara porque estaría mejor.

Al día siguiente desperté completamente pálido... Mis manos estaban frías y me dolía la cabeza horriblemente... Me tuve que ir a la escuela y al regresar me contacte con Nohemí y le dije lo que paso.

"Solo fue un sueño... No te preocupes... Estarás bien"

Me tranquilice y después de varios días empecé a dejar de escuchar a "mis demonios"... Aunque siempre recordare todo lo que me dijeron.

Historia De Un SuicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora