Especial:Amor eterno

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Narra Juancho.

Desperté intranquilo porque me estaba quedando sin oxigeno, era Elizabeth que me tenia aprisionado con sus enormes pechos, apreté sus pezones y su cuerpo se calentó. Despertó y me dijo excitada:

-Juancho...ahh...quiero hacer cosas contigo.

-De acuerdo te voy a satisfacer, pero seré gentil.

La empecé a besar en sus labios mientras masajeaba sus pechos suave y cariñosamente, lentamente jugaba con su lengua mientras nos besábamos. Me rodeó con sus brazos y deje de tocarlos y solo nos miramos fijamente.

-Elizabeth, me has hecho muy feliz. Eres la mujer que he deseado toda mi vida, y ahora puedo estar contigo para siempre.

-Me alegro de haberte encontrado-me dijo-al parecer esta relación durara un buen tiempo.

Después de estas palabras mire sus pechos fijamente y me regañó diciéndome:

-Anda, después de todo son tuyos.

Los empecé a chupar mientras escuchaba sus gemidos, bajaba lentamente tocando sus hermosas caderas. Le quite sus panties y suavemente sobaba su vagina; su cuerpo se calentaba cada vez más.

-Juancho quiero que tu cosa entre dentro de mi-me dijo excitada.

Me quité mis boxers y el amigo estaba entusiasmado. Lo introduje en ella y solo gritaba empecé suave, cada vez aceleraba el paso hasta que llegó un punto en el que ya no lo soporte y me vine. No quise hacerla sufrir más así que me entre a bañar y la deje durmiendo. Pensaba que si hacer esto era lo correcto. Bueno me gustó ya que era mi primera vez y lo hice con la persona que amo.
Salí y me puse ropa casual y mi armadura. Le di un beso en la frente y baje a desayunar. Vi a Maicol sentado en la entrada del balcón tarareando una canción que le encantaba.

-Eh amigo, que haces?-le dije.

-Oh hola Juancho tuviste una mañana agitada.

-A que te refieres?

-Nada solo hablando.

-Bajamos a desayunar?

-Ve tu, ya me comí un paquete de papas y una gaseosa que tenia en mi mochila.

-Y que has estado haciendo?

-Me pasé la noche aquí pensando. Mierda, Aine, no la he ido a ver desde anoche.

-Que te vaya bien.

Bajé las escaleras mientras el tipo se iba, tenia pensado cocinar algo para Elizabeth.

Fin de la narración de Aine.

Corrí hasta la habitación de Aine y por suerte estaba dormida. Me senté a su lado quitando su lindo cabello plateado de su cara. Decía tonterías mientras dormía sobre mi,me acosté y me abrazó fuerte mente. Esa felicidad duró poco Elkin entró por un portal paralizandome y cogiendo a Aine.

-Ay, hace cuanto no nos vemos?-dijo.

-Deja a Aine...loco desquisiado.

-Tranquilo, la tratare bien.

Se empezó a desvanecer; pude volverme a moverme pero no lo detuve. Grité fuertemente; escribí una carta rápidamente y me fui como alma que lleva el diablo. Ya sabia a donde se la había llevado la segunda ciudad grande de Tristain. Podía sentir la esencia de Aine allí por la detección de esencia de personas cercanas a mi gracias a la espada.

Hola a todos el especial aqui esta. Espero que les guste tratare de no hacer momentos tan excesivos ya que ps ya mi libro es conocido por su trama.

-se despide su amigo Manuel-san XD.

Recuerdos De Una EspadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora