ESPERA. Antes de que empieces a leer debo darte un pequeño aviso. volveré a usar los guiones.
-Muy bién- dije entusiasmado- comenzaremos con canalizar tu energía.
-Espera- dijo el chico un poco asustado- yo ya sé canalizar mi energía, te lo voy a demostrar.
Leimer se alejó un poco de mi y de inmediato sentí un aura que me paralizó completamente.
Era una aura aterradora su poder demoniaco era muy denso.-¿Que eres?- dije horrorizado a pesar de ver cosas peores pero es un niño era demasiado peligroso poseer tanta energía maligna.
-¿Eh? Soy un demonio como tú- respondió confundido por la expresión de mi rostro.
-Pero yo poseo sangre de demonio y su esencia.
-Pues yo soy un demonio completo.
-Quieres decir que, ¿haces parte de las tropas de el emperador?-dije molesto.
-Te equivocas, soy un demonio completo por mis padres pero en concreto soy medio humano medio demonio.
-!¿Como puede ser eso posible?! Si tu aura tiene el poder de un demonio normal.
-Dejame explicartelo, vale?
-De acuerdo. Entremos al refugio y me cuentas.
Luego de un rato comprendí todo. Resulta que su madre es un demonio de elite y ellos alberga una energía mayor a la de los demás es decir son los demonios de la mejor "categoría"; su padre que es un humano encontró a la demonio malherida una noche lluviosa al parecer hubo una seria pelea y ella fue la única que se encontraba en el lugar. Bueno en fin, ellos terminaron juntos y tuvieron a Leimer y por esa razón alberga tanta energía.
-Interesante- dije asombrado por la historia- Como tal parece has completado la primera fase de tu entrenamiento lo siguiente será aprender a utilizar esa energía.
-Vale-dijo listo para todo.
Salimos de nuevo y de inmediato comenzamos con el entrenamiento, era un poco torpe pero su progreso iba mejorando cada vez más.
Me recordaba a mi infancia; como cuando estaba aprendiendo a montar bicicleta o a escribir o leer, ese chico era como una representación de mi cuando estaba pequeño. Cada vez que fallaba yo solo lo animaba o le sonreía por su esfuerzo, desde que empezamos a hacer algo en esos inicios no lo hacemos a conciencia es como si lo hiciéramos porque nos toca pero cuándo lo entendemos y gente nos apoya dan ganas de hacerlo eso es lo que sentía Leimer cada vez que lo animaba. Su esfuerzo era cada vez mas fuerte, pasaron varias horas y ya lograba dominar todos los trucos con la espadas aunque le faltaba afinarse un poco.-Vives lejos de aqui?-le pregunté.
-Un poco, casi al otro lado de la ciudad.
-Venga sube a mi espalda te llevaré a casa.
-Acaso vuelas?
-En el blanco chico.
Se subió a mi espalda asustado pero apenas empezamos a surcar el cielo nublado su temor desapareció convirtiendose en entusiasmo. Unos minutos más tarde llegamos a su casa. Tener un aprendiz después de todo no era tan malo es más me entretenía mucho con él como si fuera mi hijo; a pesar de tener 17 años y faltando unas cuantas semanas para los 18 iba a ser padre tan rápido era algo emocionante pero a la vez inquietante.
-Bien, aqui nos despedimos-dijo exhausto.
-Pues si, nos vemos Leimer.
-Espera.
-Eh?
-No quieres entrar?
-Luego, yo también estoy cansado. Descansa.
-Tu también.
Un buen muchacho me recordaba a mi de pequeño.
*suena el zipxed*
-Oye viejo donde andas-preguntó Jason.
-Tranquilo ya voy llegando.
-Bueno hazle, tenemos una sorpresa para ti.
Me encantan las sorpresas y viniendo de este tipo debía ser algo bueno. Llegué a casa y me recibieron con un puño si, así como les digo un puño. No era ni Jason ni nadie de los otros, al parecer eran unos secuestradores
Pero lo más raro es que en el Zipxed sonaba igual a Jason. Me golpearon perdiendo completamente el sentido.Un ratico mas tarde...
-Despierta-escuche la voz de una mujer.
-Pero que?-Reaccioné.
-Oye cobra sentido.
-Ya maldita sea estoy despierto.
-Cuida tu tono soldado.
-Soldado?
-Lamento haberte tomado por la fuerza pero debíamos ocultarlo.
-Vale...
-Mi nombre es Dins. Comandante de las fuerzas de la nobleza de Tristain.
-A ver cuéntame más.
-Si tienes algo de cerebro en tu cabeza recordarás en la cumbre de hace unos días que se te pidió ser el líder de tropas en la guerra en pocas palabras un comandante mayor a mi.
-Primero que todo:
Vete a la mierda con mi cerebro que funciona mejor que el tuyo.
Y segundo:
Ya lo sabía así que no había nesecidad de cogerme a putazos en mi casa vale?-Señor, si señor.
-No me digas así dime sempai.
-Muy bien Maicol-sempai.
Despues de tanta cháchara me presentaron a todo el comando de la nobleza nombrándome comandante líder de las tropas

ESTÁS LEYENDO
Recuerdos De Una Espada
FantasíaImagina un mundo donde todo es como una fantasía pero con una pizca de guerra y desesperación, aquí es donde inicia un largo camino lleno de incógnitas junto con lo versátil que puede volver la violencia a una persona. Un grupo de personas se verá a...