||Cuarenta y Cuatro||

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Termine caminando a mi casa luego de que Harry me haya avisado que no puede llevarme a la mía, tenía una junta con su padre para ver si le dan un puesto en la empresa. Quise acompañarlo pero mis exámenes finales eran en cinco días y debía estudiar para no sacar una mala calificación. La tarde era tranquila, serena y el cielo tenía un color rojizo, hermoso. Todo esta tan callado, que me puse unos audífonos para poder escuchar la música de Bruno Mars tranquilamente.

Mi casa no esta tan lejos de la escuela pero tampoco es tan cerca. Nunca había caminado de la escuela a mi casa, me da miedo los callejones oscuros que hay de camino a ella. Oigo un pequeño ruido detrás de un bote de basura por lo que me quitó los audífonos para poder echar un vistazo a ese bote de basura. Veo un pequeño gatito lleno de polvo saliendo tímidamente del bote. Lo agarro arruinándole con voz dulce cuando unas manos se posan en mi boca. Intento gritar, pero nada sale de mi boca siento que me quitan al pequeño de los brazos. Lloró, o más bien suelto lágrimas sin ninguno sonido. Un cálido pero escalofriante aliento toca el lóbulo de mi oreja. Suelta un risita malévola haciéndome temblar entre sus brazos fríos.

—Sh, tranquilo Louis — susurraron con voz fría — ¿si quito mi mano serás obediente y te quedarás callado, cierto? — asiento frenéticamente — bien, iré quitando mi mano pero nada de hacer huidas dramáticas, conozco a Harry y podría terminar muy mal si no obedeces

Cuando quito su mano yo solo me quede quito en mi lugar respirando  de forma entrecortada, no puedo ver su rostro ya que esta cubierto por una máscara pero solo se que sus ojos mieles los he visto. Sus manos están sujetando mi cintura con fuerza de seguro formando marcas que serán morados mañana.

—¿Q-quien eres t-tu? — balbuceo tontamente, este solo aprieta su agarre evitando que luche contra el

—De ahora en adelante me volveré en lo que veras luego de cada pesadilla, seré uno de tus peores demonios, ángel — su sonrisa burlona me causo aun mas miedo que sus ojos sin sentimientos, vacíos y carentes de brillo

—S-suéltame — susurró cuando lo siento pegándome a su cuerpo — puedo darle lo quiera pero no me haga nada

—Lo único que quiero es tu hermoso culo, relleno y firme, ángel — sus manos bajan a mi trasero moliéndolo entre sus grandes manos, suelto un chillido ante la brusquedad

—¿Que me harás? — agradezco que mi voz suene algo mas firme

—Algo que a las pu*as les gusta, algo que tu vas a disfrutar mucho — me giró bruscamente pegándome a la sucia pared, suelto un chillido. Un nudo se instala en mi garganta, solo suelto pequeño gimoteos intentando escapar de sus manos — sh, tranquilo lo vas a disfrutar

Su cuerpo se pega al mío mientras muele su entrepierna en mi trasero, podía sentir erección en mi trasero. Quise gritar pero du mano tapo mi boca, solté lágrimas contenidas, ¿qué sucederá conmigo?¿tendré tatuado en la frente la palabra "problemas"?. Cuando sus manos empezaron a tocar mi cuerpo yo solté un sollozó, tocaron mi trasero, pezones pero yo no sentía placer, sentía asco mucho asco. Quería gritar, quería golpearlo, quería refugiarme en los brazos cálidos y seguros de mi novio, oh Harry. Diablos, ¿qué pasará ahora?

—P-por favor, se lo ruego señor — el soltó un asqueroso gemido en mi oído

—No sabes como me pone que me digas señor — susurró en mi oído para luego morder el lóbulo de mi oreja, me giro para luego agarrar en mis labios entre los suyos que están resecos, muerde fuertemente y siento el sabor metálico de la sangre, sumamente asqueroso — voy a hacerte gritar de placer, vas a disfrutar esto mucho, princesita

—Voy a gritar pero de asco, idiota — bramó entre lágrimas y escupo su cara, logrando recibir una fuerte cachetada — idiota, eso no me duele. He recibido golpes a lo largo de mi vida, estoy acostumbrado así que una bofetada no me molesta

Through The Darkness » Larry Stylinson » NiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora