Star Wars: El amor de Darth Vader

Capítulo 11: El final del Emperador

Narrador Padmé:

Llegamos a la sala del trono y vimos que tanto Anakin como Obi-Wan estaban tirados en el suelo siendo torturados por los rayos sith del Emperador Palpatine, pero lo que vi fue ya ninguno se movía ni siquiera se quejaban del dolor y yo...no pude evitar que se me salieran unas lágrimas... No, Anakin, no puede estar muerto...No.

Padmé: - ¡Anakin! - grité desesperada pero en ese momento el Emperador se detuvo y me lanzó sus rayos sith pero Fernanda logró evitarlos con su mano y yo corrí hacia mi Ani, quien yacía en el suelo muerto - ¡Eres un monstruo! No entiendo porqué lo mataste si tú lo estabas usando - y me puse a llorar amargamente y Fernanda hizo lo mismo con Obi -Wan.

Darth Sidious: - Desde que la conoció Vader fue un siervo infiel y odio que me reten o que me desobedezcan sobre todo una mujer muy testaruda como usted - dijo volviendo a lanzarme sus rayos pero Fernanda volvió a evitarlos.

Fernanda: - Pues quiere decir que si somos personas que pensamos y no seguimos sólo órdenes de los tiranos como usted - y lo empujó con fuerza.

Darth Sidious: - Creí que había quedado claro el hecho de que no la quería ver de nuevo cerca de Vader otra vez señorita - dijo entredientes - porque ya sabía las consecuencias de esa situación y ya ve lo que sucedió.

Fernanda: - Pues ¿qué cree? Que jamás me aparté de su lado, porque siempre estuve disfrazada de alguien muy importante el cual le era de mucha lealtad, bueno lealtad falsa - y mágicamente ella dio a conocer la imagen con la que se ocultaba Fer mientras estaba aquí.

Darth Sidious: - No...no es posible...¿tú? - dijo impactado, pero yo no podía dejar de ver a mi esposo muerto sin dejar de llorar, yo no quería que se fuera yo sabía que el emperador me mentía con respecto a lo de que me dejó abandonada con mis hijos.

Fernanda: - Así es Lord Sidious estuve oculta todo este tiempo para vigilarlo y espiar todos sus movimientos y lo mejor de todo es que ahora ni su gran ejército lo apoya - dijo sonriendo.

Darth Sidious: - Ja, eso no es posible y ahora por su traición sufrirán el mismo castigo que estos dos esclavos -estuvo a punto de electrocutarnos con sus rayos pero de repente salió alguien por detrás de él.

Comandante Wolffe: - Yo no haría eso si fuera usted - la cara del Emperador se empalideció todavía más de lo que ya estaba - baje las manos en este instante lord sith.

Darth Sidious: - Eres un traidor al imperio, ¿cómo te atreves a amenazar al fundador de este nuevo gobierno? - dijo molesto volteando a verlo.

Capitán Rex: - Por la misma razón por la que todos estamos aquí - en eso vimos que entró un escuadrón completo de clones armados que apuntaban a Sidious.

Fernanda: - Verá su excelencia - dijo sarcásticamente, pero en eso sentí como una mano tomaba la mía suavemente y cuando volví la mirada me sorprendí de que era Anakin que estaba vivo, tuve que contenerme para no gritar a los cuatro vientos que el amor de mi vida estaba de regreso conmigo. Lo que sí hice fue acercarme lentamente para besarle los labios - desde que me enteré que usted mandó a crear un ejército para la República, sospeché que no era para otra cosa más que para luego destruir a los jedis - hizo una pausa - luego me fui a Kamino discretamente para que no me reconocieran y luego cuando vi la fabricación de los clones con la instalación de los chips inhibidores de la Orden 66, hice un hechizo de anulación de aquélla orden - la cara del Emperador estaba más que molesta por el asombro.

Capitán Rex: - De ahí todos los clones nos enteramos de sus planes diabólicos y todos acordamos en que cuando llegara el día en que usted diera la concesión de llevar a cabo la Orden 66 todos los clones fingiríamos mantener lealtad hacia usted fingiendo matar a todos los jedis que quería pero en realidad ninguno está muerto - la cara del Emperador empalideció todavía más - y todos ellos nos han ayudado a deshabilitar todas las bases imperiales.