Aléjate. (Segunda parte de Aiko)(terminada)

Capitulo 30

Sasuke: Tu ya lo sabías.— su voz sonó cortante.

Un nudo se me hizo en la garganta.

Aiko: Yo... Yo, no se qué decir. Creí que tú ya sabías. A mí me lo dijeron hace poco.— me interrumpió.

Sasuke: Y aceptaste ir con ellos.

Aiko: Están obligándome. No es como que yo quiera irme sin ningún problema de mi aldea.— Sasuke me miró aun más enojado.

Sasuke: Pues eso parece.— se dio la vuelta y comenzó a alejarse.

Aiko: ¡Sasuke!.— corri detrás de él y al llegar a él lo abrace fuertemente por detrás.— ¡Te amo! Solo te amo a ti. Y soy una estúpida por pedirte que me dejaras. Por decirte que no te quería e ignorarte. Soy una idiota. ¡Pero es que estaba tan celosa! Que dije todo eso sin pensar. Realmente no me quiero casar. Por qué odio que me digan qué hacer y menos si me lo dice Kakashi.— chille.

Sasuke se quedó totalmente quieto no decía nada, solo se escuchaba mi respiración irregular.

Aiko: ¡Dime algo joder!

Sasuke: Te mentí. Y no quiero... Regresar contigo.— mi corazón latió fuertemente. ¿Me mintió?

No lo solté ni un segundo. No lo iba a hacer. No otra vez.

Aiko: ¿Me mentiste?

Sasuke se soltó de mi agarre y volteo a verme, tenía los ojos rojos y cristalinos. Eso me partió el corazón.

Sasuke: Te mentí.— confirmó y como si se tratase de la arena que se la lleva el viento el desapareció.

(. . .)

Naruto: ¡Cuidado!.— mire hacia enfrente, el balón iba directo a mi, pero alguien lo detuvo casi cerca de mi cara. Gin.

Gin: Deberían tener más cuidado.— les regreso el balón. Yo solo suspire y seguí mirando el pasto.— de nada.

Aiko: ¿Dónde está tu hermano?

Gin: ¿Zen? Debe de estar cogiendo por ahí.. Ya que su prometida no le da eso.— rodé los ojos. No iba a darle tanta importancia a algo como eso.

Aiko: ¿Y tú? ¿Qué haces aquí?

Gin: Pues... Vine a verte para sabe si de casualidad querías.— lo interrumpí.

Aiko: No.— me levante. Pero él me tomo de la mano y me jaló hacia el. De un rápido y muy ágil movimiento se puso a horcajadas de mi.

Gin: No eh terminado.

Aiko: De verdad que no quiero lastimarte. Me prohibieron luchar, así que quítate de encima mío. Ahora.

Gin: Realmente te deseo.— su mirada bajaron a mis pechos.— quiero que seas mía antes de que seas de Zen.

Aiko: Uno.

Gin: Quiero hacerte mía.

Aiko: Dos.

Gin: Aiko...

Active mi sharinga y el rápidamente se alejó de mí y comenzó a gritar como un niño asustado, pues dentro del genjutsu que le cree él estaba siendo cortado parte por parte. Ya llevaba media hora dentro de ese lugar, pero acá cinco segundos. Seré castigada por esto lo sé 😂.

Lo saque del genjutsu y me miró asustado, después su vista se perdió. Estaba como que atontado. Y fue ahí cuando me preocupe. Naruto y los demás llegaron rápido.

Naruto: ¿Qué pasó?

Aiko: Nada, solo jugamos.— sonreí.

Agarre a gin y trate de llevarlo a un lugar donde no hubiera tanta gente y así poderlo matar. Ok, no haría eso, pero no por qué yo no quisiera, sino por qué no lo tengo permitido. Pero entonces frente a mi Zen apareció.

Aiko: Mierda.— deje a Gin y me puse derecha.— hola niño lindo.— sonreí.

Zen: ¿Qué le has hecho?.— sonrío apuntando a Gin.

Aiko: Es un llorón no aguanta nada.— sonreí tímidamente.— Creí que estabas cogiendo con alguna chica.— dije sin pensar.— ¡Perdon! Digo yo creí que tú..— no pude terminar la oración, pues Zen me había besado.

Me quede inmóvil sin saber qué hacer. Entonces el mordió mi labio y se separó de mi abrió sus ojos y me miró. Era nuestro primer beso.

Zen: Yo no cojo, yo hago el amor, no con cualquiera, solo con la persona a quien llegó realmente a amar.

Aiko: ¿Has llegado a amar a alguien?.— murmuré. Fue lo único que se me ocurrió decir.

Zen empezó a reír y asintió. Yo intenté sonreír, pero rápidamente quite mi mueca, el acababa de besarme como si realmente fuéramos algo por qué nosotros queremos y no por compromiso. En eso sentí una extraña sensación. Rápidamente voltee hacia mi izquierda y vi a Sasuke observándome con el uniforme de anbu. Se pudo su máscara y se fue.

Zen: ¿Quién era ese?.— su voz había soñado algo extraña. Era como de misterio, como si advirtiera algo.

Aiko: Sasuke.— le respondí. El no sabía lo que Sasuke y yo éramos, o llegamos a hacer.

¿?: ¡Oye tú!.— mi cuerpo se tensó.— me dijeron que eras un elemento importante en la raíz y que debía convencerte de regresar.— carraspeo.— son la nueva líder y te ordeno regresar.— su voz era burlona.

¿Por qué a mí?

Me voltee quedando frente a frente con Mckenzie. Esa estúpida princesa arruina todo.