Capitulo 4

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Viajar en dragón es increíble, pero se te duerme todo, de tanto sujetar su piel y sentir el frío ya que estamos en invierno, creo pues...todo mi cuerpo está congelado pero no creo que vaya a decir nada, podré aguantar.

- Jen, ¿como vas?

Izan vuela a nuestro lado, parece ser que el fuego que emana de su cuerpo no es caliente...el es un suertudo está caliente, seguramente

- Estoy bien - miro a otro lado, no puedo mentirle a el...y creo que lo descubrió, me conoce demasiado bien

- Bueno...si tu lo dices

Le sonrió mientras vuelvo a mirar al mar, estábamos sobrevolando el océano, creo o lo que sea que estemos pasando, pero lo único que sabía era que a lo lejos ya podía ver una isla, eso es bueno.

- Voy a avisarle - dice Izan mientras aumenta su velocidad

- Claro

Poco a poco veo como Izan ya estaba cerca de la isla, que rápido es.

Mi cuerpo vuelve a dormirse por completo, solo espero que no se mueva bruscamente o si no, me caeré al agua y creo que ahora no está caliente.

- ¡Mario!- escucho gritar a un hombre.

Miro al frente, mientras intento asimilar que un gran pájaro parecido a un águila pero cuatro veces su tamaño, se nos acerca.

- ¡Has vuelto!- dice mientras hace parar en seco a Mario para no chocarse

Mierda

Siento como comienzo a resbalarme de su espalda, esto es malo.

Intento avisarle, en vano, ¿porque no podía hablar?

Veo mi cuerpo caer, antes de tocar el agua y comenzar a hundirme, mi cuerpo no se mueve...No lo entiendo.

Mis pulmones comienzan a llenarse de agua, tengo que salir y ya.

Intento moverme, consiguiendo mover un poco mis piernas, pero no lo suficiente, hundiendo me aún más, perfecto, moriré de ahogamiento y de frío...que muerte más típica...

Antes de cerrar mis ojos y esperar a que mi cuerpo reaccionase algo y poder salir de esta, noto unas manos rodear mi cintura y llevarme por el agua.

Intento mirar a la criatura que me ha cogido pero solo veo borroso, me falta el aire.

Esta con rapidez me saca del agua, mientras yo intento respirar y escupir el agua que había tomado.

Después de un rato de toser a lo bruto consigo respirar a la perfección en tierra firme

- Gracias - miro a la criatura, es extraña.

Un cuerpo azulado, pelo azulado y ojos blancos, una mujer pequeña, más o menos una cabeza y media más pequeña que yo, es una extraña criatura, ¿que es?

- No hay de que, Jen

- Espera...esa voz, no jodas...¿Nuria?

- La misma

- ¿Tu también?

- Y algunos mas...pero lo más importante, ¿que haces aquí?

- Pues hace un rato morirme ahogada, ahora respirar

- No me refiero a eso...

- Lo se, me ha llevado Izan y Mario, un chico que conocí un día, ¿ayer? Puede ser...No me acuerdo.

- ¿Izan? ¿Mario? ¿donde están?

- Izan vino aquí a avisar a alguien de algo, Mario se quedó hablando con un chico...un ¿águila gigante? Y ni idea donde están

- Lo que no se...¿porque tu estas aquí?

- Ni idea.

- Te llevaré al pueblo, puede que encontremos a Izan allí.

- Okey, brújula espero que me guíes bien

- ¿Brújula? Oye...

- Perdona, vamos Nuria ayúdame estoy perdida hace nada creí estar en Zaragoza y ahora se supone que estoy en un mundo ¿de cuento?  No lo se, estoy confusa...

- Te perdono, vamos a buscarlo

- Claro

La abrazo fuertemente mientras comienza a volver a ser humana, me gusta más la Nuria de siempre.

Comenzamos a caminar por un sendero un tanto extraño, árboles enorme, hojas de diversas formas y troncos extraños...

Antes de poder preguntarle a Nuria, veo una silueta masculina cogerla y llevársela, perfecto ahora estoy sola.

- Nuria - grito pero no recibo respuesta - Maldita sea mi suerte, ¿y ahora que?

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⏰ Última actualización: Sep 17, 2016 ⏰

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