Capitulo 2

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Draco estaba en su habitación, tumbado en la cama, observaba el techo con gran concentración mientras retorcía un mechón de rubio cabello entre sus dedos.

Últimamente le daba por pasar horas en su habitación haciendo exactamente lo mismo. Fruncía el ceño cuando las interrogantes en su cabeza se hacían demaciado complejas como para darles una respuesta facíl, sencilla, lógica. Pero a decir verdad, no tenía respuestas a las más sencillas preguntas y si las tenía se negaba a reconocerlas abiertamente.

Se negaba a reconocer que la mirada penetrante de Potter lo había perturbado lo suficiente como para tenerlo a las dos de la mañana pensando. Intentando encontrar la lógica a la situación. No conforme con eso, su aroma le había parecido bastante atrayente, delicioso... varonil.

Para empeorar la situación, se había encontrado al cuatro ojos al siguiente día y este lo había mirado exactamente igual, solo que esa vez iba sin su séquito y el ojiverde se rió de él por su expreción. Y como no, él mismo se habría burlado de Potter si los papeles fueran al revés, si hubiera sido Potter el que se quedara mudo y con cara de estúpido observando los ojos del otro, perdiéndose en la profundidad de su mirada.

Y solo para añadirle un poco, un poquito más, el ojiverde lanzó una mordida y una sonrisa a lo cual él, en acto reflejo se había hecho hacia atras, tal como un pequeño asustado. Ahora el estúpido cuatro ojos creería que le tenía miedo.

Se dio la vuelta mientras gemía de incomodidad, se movió como si le pesará mucho. Terminó en la mima posición.

Debería dormir ya, tenía que ir a trabajar por la mañana. Agradecía que los turnos de Potter no coinsidierán con el suyo, no mucho.

***

Harry se levantó muy temprano para prepararse e ir a trabajar. Hermione no dejaba de parlotear sobre su exnovio, Ron Weasley. Sobre lo poco que la valoraba y lo mucho que no la quería.

Animate, Herms - ella no parecía especialmente triste, mas bien se notaba molesta. Pocas veces le había visto así y sabía que eso era por algo mas que haber terminado con Ron - cuentame que te pasa.

Ella soltó el aire con muy poca gracia - sabes que no tiene que ver con Ron - asintió - es... no se que me pasa. Mis cambios de humor me enloquecen a mi misma. Todo me molesta- hizo una pequeña pausa frunciendo el ceño - ayer... ayer casi exploto con Parkinson.

Harry alzó la ceja, ¿qué tenía que ver la ojiverde en todo eso?

Ayer la topé con Malfoy en el ascensor, me importa un pelo de rana lo que hagan o digan pero...

Ajá - le animó a seguir hablando.

No iban solos, también iba esa chica rara, la del departamento de finanzas -Harry asintió ignorando la extraña incomodidad en su pecho. No quería hablar de eso pero sería grosero no escuchar a su amiga cuando ella lo ha escuchado tantas veces a él.

Ignoró también el recuerdo del aroma del rubio e ignoró olímpicamente lo mal que se sintió por asustar a Malfoy en el elevador.

Parkinson la sujetó de la cintura y le susurró al oído, haciéndola sonreír como estúpida - el ojiverde tenía una expreción divertida al ver la reacciones de la castaña... parecia estar celosa.

No es lo que piensas Potter - se defendió al ver su expreción - ella no me interesa. Además lo hace para molestarme, por rechazar su invitación hace seis meses. Pero no son celos. Es solo que no tienen decencia. Mira que dar esos espectáculos en el ministerio.

Harry se rio de ella, así, sin mas - si estás celosa.

Ella hizo un sonido y gesto de frustración hacia él - te odio, sabes.

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