Cápitulo 2

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-Hola, soy Fionna y esta es mi fiel compañera Cake. ¿Tú como te llamas?- me sonríe.

Bajo la mirada y no contesto. Simplemente no quiero hablar con nadie. Intento procesar lo que me esta pasando, pero nada tiene sentido.

-Veo que eres de pocas palabras- su sonrrisa no se borra- supongo que querras vestirte. Yo te puedo dejar algo de ropa.

Asentí levemente. No iva emitir sonido alguno, pero tenía claro que no me quedaría mojada envuelta en una toalla.

Me guíaron hasta una habitación. Allí me dieron una camiseta azul a juego con una falda, medias y unos zapatos. Luego me mostraron el cuarto de baño y me enceré con pestillo.

Me sequé y vestí con la ropa que me prestaron. La camiseta aparentemente ceñida, en mi cuerpo quedaba floja. La falda se me escurría, asi que tuve que anudarla. Las únicas prendas de mi talla eran las medias y los zapatos.

Apesar de ya encontrarme vesatida, no quise salir. Así que permanecí dentro.

No sabía cuanto tiempo pasó, pero fue bastante. Tocaron la puerta sacandome de mis pensamientos.

-¿Estas bien? Llevas mucho tiempo ahí dento. ¿Necesitas ayuda?- Era Fionna- ¡ho...la...! ¿hola....?

Escuché como se alejaba. Me relajé, pero duró poco tiempo. Lo que al parecer era la gata Cake, se deslizo por debajo de la puerta con su cuerpo totalmente plano y una vez dentro recuperó su volumen.

-Oye chica, ¿te encuentras bien? Si te hace sentir mejor puedes acariciarme- se acercó pero negué con la cabeza- ¿acaso te hizo slgo ese pervertido?- se enfureció- yo me quedé quieta.

-¡Cake! ¿Cómo va por ahí la cosa?- preguntó Fionna al otro lado de la puerta.

-¡Bien! ¡Ahora salimos!- contestó.

"¡JA! No se que es lo que le hace pensar, que logrará sacarme de aquí".

-No quería llegar a esto- se detuvo- pero veo que no me dejas otra opción- "¿a qué se referirá?"- te llevaremos al lavoratorio de Gumball... y el te obligará a hablar- dijo con voz perturbadora.

-Esta bien- resoplé- me rindo...

Cake abrió la puerta y salimos. Nos dirijimos a la cocina y ahí nos esperaba Fiona con dulces y chocolate caliente.

-Entonces... ¿Como te sientes? ¿Ya estas más relajada?

-Supongo- respondí sin ánimos.

-Y... ¿Como llegaste aquí?

-Por el baño... Creo- me miraron con ceño fruncido.

-¿A que te refieres con eso?

-Eso, literalmente, salí de la ducha y caí sobre aquél joven.

-¿¡Estabas duchandote en casa de Marshall!?

-¿Qué? ¡No...! ¡Me estaba duchando en mi casa!

-Lo siento. No logro entender. ¿Entonces porque caiste sobre el?

-¡SI ES QUE YO TAMPOCO LO SÉ!- tape la cara con las manos y se me derramaron algunas lágrimas.

Me abrazaron por los dos lados.

-No te preocupes, te llevaremos con Gumball y todo se solucionará- las aparte bruscamente de mi- ¡NO PIENSO IR CON ESE LOCO!- Fionna se extrañó, y yo empecé a lanzarles objetos, pero Cake se fué junto con Fiona.

Al final volvieron con una cuerda. Ya no me quedavan objetos que romper, así que me quedé desprotegida. Me ataron y me llevaron.

Creo que al final conoceré a ese tal Gumball... y no estoy nada feliz. Después de como habló Cake en el baño, no me dá buena espina.

Pesadillas de Nochesfera          [Marshall lee]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora