CAPÍTULO 3

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Tras 20 minutos de ruta llegamos a un parque en el que sólo apreciamos a una pareja de adolescentes que al verlos inconscientemente siento ¿vergüenza? Y me pongo algo roja. Yo y Chris sólo nos miramos, sonreimos y nos sentamos a descansar un poco. A lo lejos, hay un grupo de adolescentes y una chica parece acercarse a nosotros.
-Siento molestar chicos, ¿ tenéis mechero?
-Oh, no es nada. Digo sonriente sacando el mechero del bolsillo pequeño de mi mochila y se lo doy.
- Gracias! Que tengáis una buena tarde pareja! Dice devolviendome el mechero con una sonrisa.
Nos miramos a la vez un poco avergonzados, sin saber lo que decir.
- ¿Desde cuando fumas? Dice el rompiendo el hielo y fulminandome con la mirada.
- Es una historia bastante larga, se que no es bueno pero me ayuda a relajarme en momentos como este.
( Espera!¿ que acabo de decir?, mierda ahora le debo una explicación, muy bien Vanesa!)

Suena mi móvil.

( Salvada por la campana, casi siempre estoy al borde de cagarla y siempre me salvo, esta vez se lo agradezco a mi madre.)

- ¿Que pasa mamá?
- Hola mi niña, ¿que tal la tarde? ¿Todo bien?
- Claro mamá, ¿necesitas algo? Digo poniendo los ojos en blanco, esta mujer siempre se va por las ramas.
- Emm..si, le dije a Christian que está noche hablaríamos sobre como nos íbamos a organizar y tengo que hablar contigo.
- Vale mamá, en un rato nos vemos. Cuelgo.
- Vamos! Le digo a Christian que se sobresalta.
- ¿Ya? Dice algo decepcionado.
- Si, ha dicho mi madre que tiene que hablar con nosotros sobre la organización de tu visita.
- Vámonos entonces, antes de que vuelva a llamar.
Nos montamos a la bici y vamos uno detrás de otro, me pongo delante de el, mientras el intenta recuperar su primera posición y entre carreras y risas llegamos a casa empapados de sudor.
Meto la bici en el garaje, abro la puerta, me adentro y subo directamente a mi cuarto dejando a Chris abajo.
Saco todo lo que llevo en la mochila me quito la ropa y me meto a la ducha, pongo el agua caliente y dejo que recorra mi piel sudada, me relajo cuando de repente me viene a la cabeza ¿donde va a dormir Chris?
Sólo hay dos habitaciones y mis padres están ocupando una de ellas... Si se cree que va a dormir en mi cuarto lo lleva claro, esta mujer es más buena que María Teresa de Calcuta, no le va a dejar dormir en el sofá ni aunque el propio Christian se lo pidiera de rodillas.
Me pongo mi pijama y bajo a la cocina donde están todos reunidos, es decir, mis padres y Chris.

Una Relación ¿Imposible?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora