❆ Imaginas Erik Lehnsherr ❆ & Tu ❆

A J E D R E Z

Capitulo Cinco

~*~

Mes y medio había pasado desde el día en que todos se mudaron a la reconstruida Escuela, mismo tiempo que llevabas tratando de evitar todo contacto con Erik Lehnsherr, quien a petición del profesor había decidido hospedarse un par de meses en lo que el gobierno lo aceptaba como un salvador a lado de los X-Men más que un destructor Ese mismo tiempo había resultado un....fracaso.

Tú tratabas de no acercarte, sin embargo no era posible, viviendo en una enorme mansión por una u otra extraña razón siempre nos encontrábamos en alguna habitación.

Todo un fracaso, el alejarte solo hacia que extrañases algo que nunca habías tenido ¿Cómo era posible? Con el paso de los días dejaste de correr y solo te conformabas con pasar un poco de tiempo en la misma habitación, ya fuera un lugar de frente en la mesa cuando todos en la mansión comían o solo verlo pasa junto a ti por los pasillos.

Todo esto iba de mal en peor.

Aburrida de mirar el techo de la habitación, te enderezaste en cama y pensaste en crear una pequeña función, solo para ti.

Ansiosa cerraste las cortinas y atoraste con seguro la puerta, cosa que estaba totalmente prohibida pero no podías dejar que nadie más viese aquello.

Volviste a tomar asiento sobre la cama y comenzaste a proyectar aquellas memorias que alegraban tu día.

Viste a Erik tomar el lugar del profesor para mirarte a los ojos esperando que sus esfuerzos sirvieran para algo, ahora que el dolor había pasado podías escuchar claramente aquello que decía.

—"Muy bien solo concéntrate en mi voz, mírame"—

— "Tienes que escuchar mi voz, esto que tenemos no es una maldición, es un don"—

— "él no te controla, tú lo controlas"—

— "No dejes de mirarme a los ojos, no voy a dejarte"—

— "Te ayudare a superarlo"—

—"Eso es, lo hace bien, ¿Me escuchas?" —

Y justo tras esas palabras terminaba el recuerdo, era mucho esfuerzo lo que costaba mantener tan vivido el recuerdo hasta el final, sin embargo valía la pena, solo por ver esos ojos, por sentirte... ¿completa?.

Todo parecía bien, así que intentaste nuevamente repetir aquella memoria en el vestíbulo del hotel, gran error, una memoria era tu límite, no sabías que sucedería si te extralimitabas, sin embargo lo intentaste de nuevo.

Viste la forma que el giraba en respuesta a los patéticos tartamudeos, después, de la nada se desapareció, intentaste esforzaste y recuperar el control frunciste el ceño en señal de concentración, acto seguido con el nuevo poder que habías descubierto se saliera de control volviendo la habitación patas arriba, los muebles volaron y la ventana se hizo añicos.

En lo que parecía ser un segundo, admitiendo ser el mejor tiempo de respuesta, Hank abrió la puerta, rompiendo en el camino la perilla de la puerta.

—Estas bien "......" ¿Que sucedió aquí? —

—Yo... ¡Se salió de control!— respondiste totalmente apenada en forma de una patética escusa.

Esta vez sí que habías causado, un gran alboroto.

—No debemos usar nuestros poderes dentro de las habitaciones y lo sabes. — reprendió Hank, parecía más alarmado por el desastre en el cuarto más que cualquier cosa.