Si tengo que decir algún sentimiento en concreto de lo que siento en estos instantes...
"Celos".
Definitivamente.
Solo lleva un día aquí y ya anda de deslizada con las chicas. Una en concreto. Aryana.
En los recesos siempre las encontraba traspasando saliva. A veces quisiera pensar que solo tenía la intención de causarme celos y molestias. Luego las veía tan acarameladas y se me pasa.
Quizás sea hora de olvidarme de ella y seguir mi vida. Al fin y al cabo solo era una apuesta.
-¿Podemos hablar?- Quité ambos auriculares de mis oídos y algo extrañada me fijé en la persona que tenía en frente. Allisson.
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-Lamento lo sucedido, yo...no sé por qué reaccioné así, me sentí utilizada.-
La miré de reojo y noté que tenia el entrecejo fruncido.
-¿Cómo te enteraste?-
-Laura me lo dijo...-
Paré en seco y sentí como el enojo recorría por todo mi cuerpo.
-Estaba ebria, le serví varias copas y empezó a hablar. Es mi culpa, tenía mis sospechas...-
Respiré hondo y asentí.
-Entonces sabes que fue todo por una apuesta-
Ella asintió y bajó la mirada al suelo.
-Eso ha sido lo que más me ha dolido... Cuando supe que cada palabra que me habías dicho, cada beso, cada noche que estuvimos juntas eran solo por una apuesta... sentí algo dentro de mi romperse, Hayle, jamás había sentido eso...-
Una sonrisa se asomó en su rostro que de manera inmediata desapareció.
-Me enamoré Hayle, me enamoré de ti; Ese es el problema, no quiero sentir nada por ti, pero, es imposible. Sonará estúpido pero cuando te veo siento ganas de ir y besarte; Cuando te veo me imagino un futuro contigo, aunque sea pequeño y poco duradero pero algo veo... cuando te veo, no sé...-
No dejé que siguiera hablando y la besé.
-Yo también me enamoré de ti, Allisson.-
