Abre tus ojos

Dia 4

-Kelly - era la voz de Jeff al otro lado de la puerta.
-vete - grite, guardando las lágrimas que quieran salir de mi cara, de pronto sentía mucho frío y era una sensación para nada agradable, había conocido a pocas personas con este problema tan extraño y ninguna sabia controlarlo a menos que fuera con medicamentos demasiado fuertes que terminan enloqueciendo a las personas. Un ataque de ansiedad, problemas y descontrol en la presión y un episodio de tristeza era lo que se necesitaba, la voz de Jeff sigue al otro lado de la puerta y yo no puedo parar de temblar, intento recordar lo que hacía antes en estos casos así que sólo me digo cosas como "respira lento" "todo esta bien" "no hay de que preocuparse" "todo mejorará"
-Kelly, por favor abre - Jeff suena casi resignado.
-solo deja me sola, puedo con esto-hablo con voz ahogada.
-Jeff, ven - es la voz de canela, seguro que ella le explicará todo, ya puedo respirar tranquila , solo fueron unos largos minutos, la ansiedad, el frío y la debilidad han desaparecido, pero no siento ánimo para nada, ni siquiera para ponerme en pie, jalo una cobija que esta cerca y con ella me tapó, veo como poco a poco el cuarto de mi madre se torna cada vez más oscuro, fue un día largo y ahora que lo pienso me siento mal por haber asustado a Jeff, supongo que debí decírselo, o mejor dicho mi madre debió advertí le de estas situaciones, aunque me siento tranquila de que en esta ocasión solo hayan sido unos minutos de crisis cuando vences pasadas eran largas jornadas de llanto.

Escucho que tocan la puerta, el cuarto esta muy oscuro intento pararme y dirijo la mirada a un reloj electrónico el cual marca las 4:07 am, es madrugada y por lo que veo me quede dormida, vuelven a tocar, casi olvido que es la razón por la que estoy dirigiendo me a la puerta.
-¿Kelly? Escucho una voz suave.
-si-respondo con la puerta aun cerrada recargando mi cabeza en esta, mi voz no suena suave, más bien parece que comí vidrio, suena rasposa y duele cuando intento decir algo.
-¿puedo pasar? - dudo un momento pero creo que es lo mejor después del susto que le di-¿estas bien? ¿que paso? - dijo en voz preocupada una vez que entro.
-si, estoy bien, no fue nada, solo un pequeño problema - digo bajando la mirada aunque no se da cuenta de esto debido a que no me puede ver, realmente está oscuro.
-seguro ¿puedo pasar? - dice en voz nerviosa.
-claro - me hago aun lado y lo dejó pasar, me toma de sorpresa dándome un abrazo, al principio no quería pero era demasiado cálido y por alguna razón siento que era lo que necesitaba, suspira en mi cuello soltando un aire tibio muy reconfortante.
-me diste un gran susto - hablo suave.
-perdón - es lo único que logró decir, me siento tan apenada, entonces hago algo que ni yo me esperaba, con mis brazos lo rodeo y hundo mi cara en su pecho, es extraño y agradable.
-esta bien princesa, canela me explico todo, debe ser horrible.
-lo es.
-¿tienes sueño?
-si, ¿y mamá? - pregunte.
-se fue preocupada a tu cama, supongo que dormirás sola hoy - tan solo decir eso me sentí el ser más solitario del mundo.
-¿tienes sueño? - le pregunte.
-puedo quedarme contigo un rato - me dirijo a la cama y me acuesto, Jeff me tapa con la cobija que antes tenía y se sienta a un lado de mi en la cama, lo observó un poco, puedo sentir su mirada aunque la luz no me deja verlo, siento paz y de un momento a otro alegría ¿que eres Jeff?
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Siento algo extraño no se en realidad que es porque sigo con los ojos cerrados, logró escuchar una risa la cual no reconozco al momento pero logro saber que es luke, ¿luke? ¿que hace el aquí? Abro mis ojos de repente, el se queda estático al momento y abre mucho sus ojos dejando ver un lindo color azul, sale corriendo de un segundo a otro, yo estoy muy confundida así que me siento un momento en la cama antes de bajar a comer algo, veo en el piso un marcador negro lo levanto para ver que este no tiene la tapa, una rara idea llega a mi mente así que camino al espejo para confirmar mi idea.

-¡LUkE! -grito, no quería que sonará tan mal, quería parecer sorprendida pero el dolor de garganta ocasionó que sonará enojada, casi poseída, baje al comedor para ver a Jeff sentado como niño pequeño en la mesa.
-¿y luke?
-¿luke? ¿de que luke hablas? Yo no he visto a luke, tienes algo en la cara - dice y puedo escuchar una risita atrás de la silla de Jeff.
-¿luke? - digo hacercandome cada vez más.
-¿si? - dice asomándose.
-¿que rayos te pasa oxigenado? Yo dormía feliz de la vida y solo vas y rompes mi tranquilidad asiendo cosas de niños.
-es que ya pasaban de las 12 y aun no despertabas. - dijo escondiéndose mas.
-pero no tenias que rayar mi cara. - dije molesta.
-pero te vez linda, a ver di "meow" - luke...
-ok, ok, pongamos orden a esto, luke pide perdón.
-pero le hice un favor, así no parece que siempre esta enojada.
-yo no estoy enojada - dije... Enojada.
-y Kelly no es para tanto solo son unos bigotes de gatito pintados en tu cara con marcador.
-es marcador permanente - mencione frustrada.
-ok, Kelly, perdón, aunque en mi defensa te hice un favor.
-cállate luke - dije y salí de la cocina.
-de nada - escuche que gritó.