#ocho: Dark angel

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Me dejé caer en los brazos del ángel, no podía más, odio mi vida. Todo en este maldito mundo son mentiras y estoy cansada de ello.

Angelo me cogió en brazos como si no pensara nada y besó mi cabeza.

-Quiero que me cuentes todo lo que ha pasado nena, yo estoy aquí para ayudarte...- Yo no dije nada, me sentía sola y pequeña ahora mismo.- Te llevaré a casa.

Hice un intento de bajarme de sus brazos pero él no me soltaba.

-Puedo caminar.- Susurré.

-No, no puedes, ¿Has comido algo ?- Negué con la cabeza, no he tenido apetito.- Te llevaré a cenar a un lugar.

-No puedo, llego tarde a casa, mamá se enfadará.

-Pues dile que cenarás en casa de Aby.- Me dejó en el suelo suavemente, como si de un objeto muy frágil tratase.

Cogí el móvil y llamé.

-¿Hija?

-Mamá, Aby me ha invitado a cenar ¿Puedo?- Por dentro rogaba que me dijera que no...

-Muy bien pero vuelve pronto a casa.

-Sí...-Colgué.

Le envié un mensaje a mi mejor amiga para que me cubriese y esta dijo que sí pero quería detalles de mi supuesta "cita" al día siguiente.

-¿Ya esta?- Preguntó Angelo.

-Sí.

 Íbamos caminado en un silencio bastante incomodo, tenía muchas cosas que preguntarle, ya no podía confiar en nadie.

De un momento a otro siento una fuerte mano agarrar la mía, miro hacia arriba y Angelo me sonríe. Las palabras de Harry vinieron a mi mente ¿Sabias que tu angelito guardián esta enamorado de ti? Estoy confundida yo para estas cosas no valgo.

-Llegamos.- Anunció.

Delante de nosotros se encontraba un pequeño restaurante hogareño. Las paredes de este eran como de roca. Entramos y por dentro era muy acogedor, hay una barra hecha de madera, las mesas también con un mantel encima de ellas, me encanta.

-¿Te gusta?

-Me encanta.- Respondí.

Nos sentamos en una mesa donde había una ventana que deja ver la calle. Nos sentamos el uno al lado del otro.

Angelo cogió la carta que estaba encima de la mesa.

-La verdad es que he venido una cuantas veces, digamos que no soy bueno cocinando.- Reí levemente.- Me gustas más cuando sonríes.

Creo que me puse como un tomate.

-Bueno yo pediré una hamburguesa con patatas.- Dijo él.

-Creo que yo también.- Llamó a una camarera.

-Buenas noches jóvenes, ¿Qué desean?- Preguntó.

-Pediremos dos hamburguesas con dos raciones de patatas.

-Muy bien, ¿y para beber?- Angelo me miró.

-¿Agua?- Pregunto él.

-Agua.- Respondí.

-Muy bien en unos minutos le traeremos su pedido.- Antes de marcharse nos sonrió levente y se fue.

-Supongo que ahora vienen todas las preguntas, ¿Me equivoco?

-No, no te equivocas. Quiero que seas totalmente sincero conmigo.- Él asintió con la cabeza.- Quiero saber porque borraste mis recuerdos con Harry.

Angelo se tensó y apretó la mandíbula.

-No devería habértelo contado.- Suspiró.- Yo no borré tu memoria porque quise, yo tengo gente superior a mi que me obligaron a hacerlo.

-¿Por qué lo hicieron?

-Porque los ángeles oscuros son peligrosos.

-Entonces lo que me contrastes de que Harry quería enamorarme era mentira, y tu solo bajaste para que Harry no tuviera oportunidad de acercarse a mi y me contara todo.- Hice una pausa.- Hoy recordé...recordé unos de los momentos con Harry.

Angelo me miró sorprendido.

-No puede ser...- Susurró.

-Sí, sí puede. Y con el paso del tiempo conseguiré recordar más.

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Hola, hola preciosas personitas. ¡CAPÍTULO NUEVO!

Votad y comentad por favor. Me gustría saber que os va pareciendo la novela así que comentar.

PD:  ¿Quién va a ver el 1DDay? *--*

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