En su lugar.

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Milk.

Goku y Vegeta... siempre era lo mismo. No se podían hablar, todo terminaba en golpes. El orgullo de mi principe no le permitía dejarme. Además de eso estaba molesto con Goku por haberme dejado embarazada. Tratando de explicarle que todo era un mal entendido. Entendió a Vegeta. A pesar de que amaba a Bulma no quería dejarme. Le había tomado cariño a Gohan, pero en el fondo sabia que las cosas tenían que ponerse en su lugar. Estaba cansada de los desplantes de Bulma y las preguntas llenas de tristeza de mi hijo acerca de su papa.

Cuando termino la pelea Vegeta se fue resignado a su habitación. Lo seguí por todo el pasillo entrando sin invitación. Viendo como se limpiaba el labio murmurando sendas palabrotas por lo bajo.

— Vegeta... — comencé acomodándome en vestido.

— No hables, pensé que eras mas inteligente Milk— me raspo sin mirarme.

Suspire.

— Es lo mejor... tenernos que separarnos. Te lo dije hace mucho. No lo tomes personal — le dije con suavidad tocando su hombro.

— Todo es personal para mi — me espeto moviéndose para que no lo tocara.

— Lo se... estoy muy agradecida por lo que hiciste por mi. Pero jamás fuiste feliz conmigo — dije con seguridad.

Vegeta respiro sentándose sobre la cama. Pensando en mis palabras.

— Una parte de mi — se limito a contestar — La otra si era feliz.

— Tal vez comodidad —apunte, acercándome a el para tomarlo del rostro.

— Te volverá a lastimar — aseguro negando.

— Creo que soy masoquista. No se por que lo amo tanto — conteste.

Vegeta curvo una sonrisa.

— Es tu igual... te marco desde el inicio — analizo subiendo sus hombros —. Al fin podrás tener esa vida aburrida que tanto deseabas.

— Asi es... — le dije sonriendo.

— Escúchame... si vuelve a lastimarte le cortare la cabeza — me espeto tomándome por el mentón —. Te quiero demasiado como para verte llorar de nuevo.

— Creo que Goku no es el mismo— comente — La guerra lo ha endurecido.

— Ya era hora demonios —dijo casi a gritos Vegeta.


Goku.

Gohan era idéntico a como lo había visto en la bola de cristal de Uranai. Me encanto tenerlo tanto en mis brazos, me sentía feliz y completo con mi familia. Por una parte entendía a Vegeta y le estaba agradecido. Había protegido a Milk y a mi hijo por la gran gratitud que tenia con ella. Pero para mi Milk y Gohan era lo mas importante y estaba seguro que en el fondo el lo sabia.

Luego de batallar con el y poner las cosas en orden me quede con ella en su cuarto. Busque rastros en su cuerpo de marcas pero Vegeta no la había marcado. Eso fue un gran alivio para mi. Pero aun no podía creer que todo había acabado bien después de todo. Besando a mi morena, entrando en ella con desespero. Jurando que la vida sin ella era un tormento. Y deseando darle al tiempo atrás para volver a reencontrarme con ella en el torneo. Pero ya la tenia dormida entre mis brazos. Acariciando su cabello, desnuda entre las sabanas de la cama. Sin soltarla aun pensativo y seguro que aun estaba molesta conmigo. Pero no me importaba, mientras la tuviera a mi lado.

Con el pasar de los meses todo encajo como se suponía. Vegeta con Bulma, y yo viviendo en las montañas con mi hermosa guerrera y Gohan. Sin dejar de poder mirar como hacia cada cosa de la casa atento. Sentado afuera viéndola feliz por primera vez. Acercándome a ella para abrazarla y meter mi rostro en su cabello. Ya no me importaba nada, ni las batallas o los entrenamientos. Solo quería estar cerca lo más que pudiera. Protegerla, por que la vida sin ella, era el mismo infierno. Diciéndole que la amaba mas que a mi vida propia.


FIN.


BUENOS MIS AMORES NO DOY PARA MAS ESTABA MUY DESMOTIVADA CON ESTA HISTORIA PERO BUENO GRACIAS POR SACAR TIEMPO PARA LEER AVER SI SIGO CON LAS OTRAS. ESPERO QUE LE ESTE GUSTANDOEL FUTURO DE MILK GRACIAS POR EL GRANNN APOYO QUE LE ESTAN DANDO A LA SAGA DE EL RAPTO LOS AMO MUCHO. BYE BYE...




Sin ti.Where stories live. Discover now