¡Ese jodido gato estaba loco!
No llevaba ni siete minutos en su casa y ya había destrozado la mitad de sus cosas. Su mueble estaba rasgado, hay agua por el suelo debido a que rompió el jarrón que su madre le había regalado para Navidad -aunque en el fondo se lo agradecía-, los cuadros de la pared torcidos, y sus cortinas, sus preciadas cortinas hechas trizas.
En el manual no decía que el gato sufriera de algún problema de hiperactividad o que tuviese problemas para adaptarse, todo lo contrario, decía que era un minino risueño y bromista, con un corazón sensible.
Cuando Baekhyun lo vio en la tienda para mascotas, con el cabello rojo, miradas de perrito -a pesar de ser un felino- y apartado del resto de gatos, se dijo que sería para él. Firmó todo el papeleo y no sospechó de la generosa rebaja que le hicieron, metieron al híbrido en una maleta para gatos y se lo dieron sonrientes.
Ya entendía el porqué.
- Está en la cocina ahora, es mi oportunidad para tomar el teléfono- Se dijo a sí mismo localizando el aparato desde su lugar debajo de la mesa. Se aferró con fuerza al pepino en su mano -Ya que había visto en un vídeo que a los gatos les asustaba- y salió corriendo hacia el artefacto.
Todo salió mal.
Sus pies, sus ligeros pies, se enredaron con la extensión de luces navideñas que el animal había sacado de la caja designada para esa festividad y tropezó, no pudo alcanzar el teléfono y lo único que consiguió fue un escozor en la frente.
Pero eso no fue lo peor, claro que no.
Cuando levantó la cabeza, lo primero que vio fue al peludo gato mirándolo directamente. Su pelaje blanco haciéndolo lucir adorable, junto a sus ojos oscuros burlándose de su estupidez. El pequeño le lamió la nariz y no pudo enojarse con él, ni siquiera pensó en lanzarle el pepino que tenía en su mano.
*.*.*.*
- La tostadora explotó- Avisó el animal mientras Baekhyun trataba de recoger el desastre en la sala.
El gato siguió de largo y se acostó en el sofá a ver televisión, cansado de causar desastres y de asustar a su dueño con gruñidos.
Baekhyun quedó momentáneamente paralizado, pero luego reaccionó y corrió a averiguar qué desastre había causado ese gigantón en la preciada cocina de Kyungsoo.
Apenas entró, un pan salió volando en su dirección y casi le da en el ojo. Como había dicho el gato gigante, la tostadora estaba convulsionando en su lugar, lanzando tajadas de pan que alguien había atascado en las dos entradas.
- Santa mierda- Jadeó impactado.
Con rapidez, sintiéndose como en una de esas películas de acción, corrió tomando una sartén y comenzó a golpear los proyectiles quemados que venían hacia él.
Se tiró al suelo cuando un pedazo de pan le rozó la oreja y gruñó enfadado, pero, desde allí pudo ver el interruptor de la máquina endemoniada. Se arrastró levantando el culo hasta que logró meterse en la pequeña cabina de interruptores, sacando por fin el de la tostadora.
- ¡Sí!- Gritó de felicidad mientras trataba de incorporarse.
Sintió una palmada en el trasero y se golpeó contra el techo de la cabina asustado. Se giró con rapidez y notó a Chanyeol sonriente sin apartar la mano de su retaguardia.
ESTÁS LEYENDO
Crazy pet ||ChanBaek||
FanficBaekhyun acaba de comprar un gato híbrido en la tienda de mascotas. Siempre había deseado uno y este se lo ofrecieron a un precio muy bajo, acorde a su presupuesto. Si sólo supiera a lo que se enfrentaría cuando abriera la jaula para mininos. Chanye...