"Miku&Len" La Vampiro y El Cazador de Demonios [PAUSA]

¿Quiénes son en realidad

(Len POV)

En estos momentos todo ha sido un infierno, Piko no deja de gritarme una y otra vez, aunque en parte lo comprendo.

Está claro que intenta contenerse, su mirada denota una enorme furia pero sobretodo... decepción.

No tenía rostro para verlo a los ojos, pero, ¿acaso amar a mi vampiresa es un pecado? En realidad lo es, a pesar de que no debíamos estar juntos lo hicimos y ahora estamos pagando las consecuencias de nuestros actos. Piko tenía su semblante frío, no dejaba de pedirme explicaciones aunque esta claro que solo tenía una respuesta para él...

La amo.

Estaba preocupado por Miku, si a mí tan sólo con Piko ya me fue como feria ya me imagino como le debe estar yendo.

-Aléjate de ella.

-No quiero.

-No te estoy preguntando si quieres o no, te alejas de esa perra o yo mismo la mato.

No dejaba de amenazarme con matarla, me dolía que mi hermano estuviera diciendo eso, quería simplemente que la tierra me tragara, no quería discutir más de que ya lo habíamos hecho.

-No dejare a Miku y se terminó - dije poniendome de pie para salir de ahí pero un fuerte jalón me detuvo.

-Aún no se termina - él dirigió su puño contra mi rostro con una enorme fuerza arrojandome al piso, debía estar descargando todo el dolor que sentía en ese momento - ¿Tan difícil es hacerte entrar en razón? ¡Tu eres un CAZADOR y ellos unos DEMONIOS, si tú no los matas ellos te matarán a ti! 

-¡Miku no me haría daño! - gritaba furioso desde el piso, no me arriesgaría a intentar levantarme y recibir otro golpe como el anterior, ya estaba bastante mal.

-¿Cómo lo sabes? ¿Ahora resulta que la conoces de toda la vida?

-¡No, no la conozco de toda la vida, la conozco de aun mucho más tiempo!

-Ya deja de decir estupideces - Piko golpeo a la pared con tanta fuerza que pude escuchar como algunos de sus huesos en los dedos crujían - esa tal "Miku" no es el único peligro, su estúpida familia vió nuestros rostros y no desaprovecharan cualquier oportunidad para matarnos, además Romeo ¿ya se te fundió el cerebro?

-¿De qué estás hablando? - lo miré con curiosidad y furia, ya se estaba pasando de insultitos, si no me atrevía a contestarle era porque aun me sentía culpable.

-Una de esos demonios que fue en ayuda de la maldita Mi-ku... - dijo separando en sílabas el nombre de mi amada, parecía que le causaba repulsión decirlo. Tomó aire para apretar con mayor fuerza su puño y soltar de golpe - una de ellas... ¡fue la que asesinó a tu padre imbécil! ¡Ellas son demonios de la realeza, no es un puto juego apenas tengan la oportunidad nos van a atacar!

Mi respiración se volvió agitada, ¿la chica de cabello rosado era la misma que sedució a mi padre? No tenía idea de lo que ahora pasaría, el terror y el odio comenzaron a invadirme por completo, seguro estaba pálido y mis manos temblaban, apenas me di cuenta mis mejillas estaban húmedas y mi visión borrosa, creía haber "cerrado" esa herida de mi pasado pero ahora, las lágrimas amargas ya inundaban mis ojos y recorrían mi rostro.

-¿Por fin recuerdas? Ahora dime... si tu adorada estaba con el vampiro que mató a tu padre y provocó que tu madre se suicidara.. ¿cómo crees que es ella?