Capitulo 14 "Autentica fiera"

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Me deja sobre el comedor, va al mini bar y toma una botella de champaña junto con dos copas y hielo, sirve una para él y otra para mí

- Bebé, tienes que hidratarte

- uhhh... ok

- te ha gustado nuestro aperitivo

- uf! ... mucho

- quieres jugar un poco mas

- te pedí que no me dejes pensar

- y no lo pienso desobedecer

Deja las copas a un lado de nuestros cuerpos, me abraza buscando la cremallera la hace descender y quita el vestido, dejándome desnuda, se quita su camisa color azul oscuro, mostrándome un abdomen de revista erótica, en donde el sexi hombre tiene una perfecta tabla de chocolatina, y pequeños bellos hacen un camino a su centro de mando, él es ese espécimen que me hace perder la coherencia.

Se ubica entre mis piernas y me hala para que mis pechos y pubis toquen su cuerpo, está caliente, según ciento yo mi temperatura aún sigue en aumento, es desbordante el olor a sexo que se cola entre nosotros, quiero probarlo, con mucha inseguridad poso mis labios sobre su cuello, saco mi lengua y pruebo de su piel, su colonia invade mi olfato y mi gusto lo siente terso y afrodisiaco, no puedo describir su sabor, sabe a jabón , colonia y a hombre, es una mezcla cálida y sensual, doy besos desde su clavícula hasta el lóbulo de su oreja, paso mis labios muy lento, respira con dificultad y gruñe, me deja explorar, escucharlo gemir me hace saber que estoy haciendo las cosas bien, paso a su otro hombro y hago el mismo tratamiento, su miembro toca mi coñito por medio de la ropa, el me estimula con sus movimientos, mientras yo humedezco su pantalón con mis fluidos.

Le he torturado tanto que me hace recostar sobre la mesa, toma un poco de champaña y deja que otro poco caiga sobre mi pecho y vagina, lame cada gota del licor haciéndome retorcer, su tormento continua cuando toma los hielos y los introduce en mi vagina, el frio me entumece pero el calor de su lengua sobre mi clítoris me hace enloquecer, los gemidos que desgarran mi cuerpo llena la habitación, me hace estallar en un fascinante orgasmo quita sentidos, aun temblando acerca la cabeza de su pene a mi entrada, tiene forma de media luna es grande y grueso, se me seca la boca tan solo de verlo, lo quiero dentro de mí.

Con mucha sutileza se introduce de a milímetros en mi húmeda cavidad, haciéndome retorcer, no me duele mucho, siento presión ya que los hielos cumplieron la tarea de dormir la zona, un gran espasmo cruza mi cuerpo cuando el himen es roto por su intrusión, unas lágrimas ruedan por mi cara, él toma cada una en su boca y las bebé

- ya pasa preciosa...

- uhumm...

Me enrolla las piernas en sus caderas y levanta mi cuerpo de la mesa, camina con migo sin permitir salir su espléndido pene de mi coño, nos recostamos sobre la cama, el inicia movimientos lentos de entrada y salida, se siente mucha presión pero los músculos internos se van relajando su pene me llena, bombeando cada vez más fuerte atrapa un pezón en su boca, alimentando más mi excitación mi cuerpo está en alerta y se mueve junto a él cada embestida yo lo succiono con mis paredes, aprieto para sentir esa invasión divina, movemos cada fibra de nuestro interior, en entrar salir girar, hundir, apretar, cuando su cadera gira y presiona me enloquece me llena, el descubre que ese movimiento me alimenta y lo hace con más frecuencia, en cinco... ummmm... cruatro... ooohhhh... tres... asiasiiiii... dos...grrrar... uno... ahhhhhhhhhhhhsss....sssssiiiiiii

Los espasmos son más fuertes, y yo succiono... succiono haciéndole perder el control sus embestidas son más fuertes permitiéndole llenar mi coño de su maravillosa leche...

Cae sobre mí y los dos nos sacudimos en el éxtasis del placer, no quiero que salga de mí así que lo abrazo reteniéndolo sobre mi pecho el cual empieza a chupar

- Este es el mejor sexo que he tenido en toda mi vida

- ufff!!! Me temo somos dos poli

- eres muy receptiva pequeña, eres una autentica fiera en la cama exiges y das

- solo quería experimentar, y tú has sido mi... primera vez...

- lo sé y te agradezco ese honor

- sabes me asusto el tamaño de tu amiguito

- Él tiene esa habilidad, pero sabe hacer gozar a las chicas

- ummm... no debiste decir eso

Lo empujo para que salga de mí, lo que lo pone en alerta

- solo lo digo para que no te ilusiones con romanticismos y corazones, es solo sexo en su física expresión

- si eso ya lo sabía, gracias por la lección- me lo quitó de encima y voy al baño, siento correr su semen por mis piernas, me meto a la ducha, me duele la parte inferior de mi abdomen, se siente como cuando llega la menstruación y te dan cólicos bajos.

Limpio mi cuerpo y salgo del baño desnuda, voy a la sala y encuentro mi vestido sobre el comedor, me lo pongo junto con mis sandalias y bolso, cuando voy hacia la puerta el entra de la terraza

- no quería decir lo que dije...

- tranquilo fue solo sexo, ya puedes comunicarte con Mike y contarle lo que hice en el día no olvides detalles... Adiós Señor...

Salir de la habitación con el orgullo intacto fue difícil, sé que es solo sexo y no es que este enamorada, pero me hizo sentir como la puta en turno que le abre las piernas con solo chistar los dedos, aunque me encanto esta faena de sensualidad y consumación es mi primera vez no puedo comparar...

Entro a la habitación dejo todo tirado y me tumbo en la cama, no quiero pensar cierro los ojos permitiéndole a Morfeo acunarme en sus brazos, mañana me recriminare y llorare por hoy no más pensar, solo me queda la satisfacción que ya no moriré virgen

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Perdida en mi Mundo - Primera entrega de la saga PerdidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora