No me gusta esto de echar de menos.
De tragarme tu ausencia y sentir que esta me come por dentro.
De oir tu nombre en todas las canciones que tengo que en el móvil.
No me gusta recordarte cuando oigo la palabra amor.
No me gusta pensar en el anterior otoño, cuando ni la tempestad más grande conseguía separarnos.
¿Y ahora?, si es que llegó el invierno y lleno nuestro rastro de nieve.
Y la primavera lo derritió, sí, la misma primavera que un día nos unió.
Pero claro, en verano estábamos demasiado ocupados para dejar este rastro de nuevo.
Y ahora estoy aquí, más que perdida.
Ya te valía, podias al menos dejarme un rastro de migas.
Que sí, que me da igual que no me llevara a ti, con tal de ir a alguna parte.
Estoy tan cansada, de verdad.
Estoy cansada de empezar a querer cosas que no me duran ni dos telediarios.
Estoy cansada de oír la misma melodía en bucle en mi cabeza, que ojalá fuera cualquier canción, pero de verdad, como no ibas a ser tú.
Es que estoy cansada de poner indirectas, y de aunque me arme con la valentía para decírtelo a la cara, solo me muestres tu espalda.
Y lo peor de todo, que la ingenua de mí se quede a mirarla.
ESTÁS LEYENDO
Ver en verso
PoetryPara todos, para que comprendamos que es mejor vivir en poesía que atrapado. Os propongo poemas sueltos, independientes. Versos que me trajo el mar un día de playa, que me dejo el viento en la repisa de la ventana, poesías que nacieron por ti, por...
