Ojitos de cielo

Capitulo 3 "No me conoces"

La noche transcurria rapido, cada hora era un segundo o bueno asi me parecia. Desde que alan me dejo estar a su lado no ha jecho mas que observarme y sonreir lo cual ha hecho que me sonroje muy seguido. Aunque estabamos en absoluto silencio era muy lindo sentir su presencia a mi lado.

- gab...¿Te gustaria bailar conmigo? -

Oh Por Dios. Alan me invito a bailar

- mmmm.. Es que yo.. - como le digo que tengo miedo a.. Bueno le tengo miedo a el.

- mira no quiero obligarte, si te incomoda mejor olvidemoslo, Si?

- Noo. No me incomoda, en absoluto es solo que... No se bailar- diablos!! Menti.

- jajaja esta bien. Yo te enseño- hay Dios. Me voy a desmayar

- bueno supongo que tratare de no hacerlo tan mal.

Tomó mi mano y nos dirigimos a el centro de la sala, agarro mi mano con fuerza y a la vez dw una manera delicada y la llevo por su nuca. Hizo lo mismo con la otra y puso sus manos alrededor de mi cintura.

- No creo que esta forma sea la mejor para bailar musica movible.

- no me interesa la musica.

- mmm. Entonces?

- me gusta estar asi de cerca de ti.

Lo mire fijamente como si no pudiera estar mas derretida, me dio un vuelta y me atrajo mas cerca de el. Estabamos tan cerca que podia sentir su respiracion, mire sus labios y me imagine mil maneras de romper el poco espacio que nos separaba.

- GABRIELAA!!- grito una voz a lo lejos.

Genial! Mi gran amiga silvana se habia olvidado de mi toda la santa noche y justo ahora cuando estaba tan cerca de este chico ultra guapo se acordaba de que existo.

- Yo... Lamento si... Interrumpi algo- dijo en forma resignada. Sabia que habia hecho mal en aparecer justo en este monento.

- No, no te preocupes. Solo bailabamos- dijo alan

- si, eso. Solo era un baile- dije de forma desconcertante

- bueno- silvana sonrio- gabi debemos irnos tu madre me asesinara si llegamos tarde. Asi que, despidete del galan.

La fulmine con mi mirada.

- Oh! Si claro- voltee hacia alan- gracias por todo, no se como agradecerte en serio, supongo que te debo un favor.

Y sin mas que decir salimos de la fiesta. Llegue a mi casa y me meti en mi cama para cerrar los ojos hasta mañana. Cuando desperte observe a mi alrededor y ya eran las diez de la mañana.

Me levante a desayunar, mi madre me pidio que saliera para comprar la comida a mi gato. Y eso de las dos de la tarde sali al centro a realizar unas cuentas compras gatunas.

Alan

Cuando al fin tenia a gabriela cerca senti como se me revolvia el estomago. Estaba tan cerca que quise besarla, se que a penas la conocia pero sabia que aquel beso seria correspondido. Cuando de rrepente llega una chica y le dice que deben irse, senti un gran dolor al dejar de acariciarla y sin mas ella se despidio de mi.

Despues de eso me fui a casa, la verdad ya no tenia ganas de seguir ahi. Solo me quede por verla a ella, por ver a esos ojitos de cielo.

Ya habia amanecido, eran las once de la mañana y tenia una pereza enorme pero aun asi decidi salir a ver a jack. Jack era un viejo con el que tenia plabeado salir uno de estos dias.

Llegue a su casa en mi precioso jeep negro, su mamá nos tenia preparado un delicioso almuerzo : Ceviche de pescado. Comimos y hablamos de toda nuestra vida, al terminar salimos a dar una vuelta por el centro.

Fue muy divertido, hace años que no me reia de esa forma, me despedi de jack y lo deje en su casa. Comenzo a llover y me estacione en un supermercado muy novedoso.

Mi vista se paralizo al ver a gabriela parada al frente de el asfalto, estaba intentando cubrirse con una funda. Era un intento fallido, ya que obviamente eso no evitaba que se mojara. No lo pense dos veces y me acerque.

- vaya gabriela! Eres mazoquista.- dije en tono burlesco.

- De.. De que hablas?,- pregunto confundida

- primero te dejan sola en una fiesta y ahora te manda a mojarte. Dime una cosa. ¿ acaso Te gusta el maltrato?

-Huy si! Que chiste!

- ya tranquila relajate. Solo es una broma.

- pues no es gracioso.

- ya bueno como digas- la mire con una sonrisa picara- y ¿Vas a dejar que te lleve a casa?

- ¿Porque habria de aceptar?- me miro con el ceño fruncido

- genial! No me digas que le eres fiel a el tal alex.- dije tragando mis palabras.

- erick y yo no somos nada!- dijo furiosa

- pruuebalo! Demuestra que te no te importa el invecil ese.

Sin mas que decir gabriela subio al auto.

- vaya! Eres facil de molestar.

- lose. Mi caracter cambia constantemente.

- oh ya veo! Eres bipolar!!

Me miro directo a los ojos y me saco la lengua. Vaya como amaba su mirada, se que no debo ser pervertido pero sus labios no hacian nada mas que provocarme.

- eres bipolar y malcriada!-me miro ofendida.

- ¿Quien te crees que eres? ¿Acaso crees que puedes andar por ahi ofendiendo a las personas? Pues dejame decirte que tu no me conoces, no eres nadie.

- tal vez tienes razon no soy nadie, pero creeme cuando digo que me muero por conocerte.

Me miro sorprendida

- yo...no..yo no queria.- la interrumpi

- solo acepta- le espete.

- ¿Aceptar que?

- que me dejaras conocerte- la mire de la forma mas tierna que jamas mirara a nadie.

- mm..nose..- dijo confundida.

- di que si, solo di eso.

Antes de que pudiera responder a mi peticion nuestras miradas se concentraron en el impacto que un choque de autos. Sin perder tiempo hize una maniobra provocando que mi jeep se dirija a una esquina.

Cuando el auto se detuvo, gabriela salio corriendo del auto casi por instinto la segui. Al llegar al lugar de los hechos gabriela se desmayo y sin dudarlo la agarre entre mis brazos.