Kyle

Capítulo 1

POV Katherin

La mañana me tomo desprevenida, la lluvia ceso hace un rato. Llevo caminando ya más de una hora, ya deben ser la seis de la mañana. El viento frío me azota, me abrazo a mi misma mientras camino por las calles solitarias de CityWoof, me siento observada. Oigo pasos, volteo y no hay nada. Vuelvo a mirar al frente, los mismos pasos. Corro lo más que puedo, mientras los pasos se intensifican. Me tropiezo con una piedra, pero me levanto lo más rápido que puedo, veo mis rodillas mientras vuelvo a correr, están llenas de una ligera capa de sangre. Arde un poco, pero sigo corriendo hasta llegar a mi casa.

Abro la puerta, entro a mi casa.

—¡Natalie, Brian! ¿Donde están?. — Grito, para que mis pequeños demonios me escuchen.

—¡Ya vamos!.— Los oigo gritar al unisono. Ellos bajan bostezando, los miro enternecida.

—Hoy empiezan las clases, mis niños.— Les digo, todavía enternecida por sus gestos.

—Ok, Kathy.— Dicen al unisono, de nuevo. Ellos salen corriendo a sus habitaciones, mientras yo voy a mi habitación, hoy comienza las clases. Después de unas largas vacaciones.

Ya dentro de mi habitación, voy hacia mi armario. Saco unas bragas y sujetador negro, el uniforme que consiste en: una camisa blanca con una corbata azul, una falda o pantalón -En mi caso usare el pantalón- azul oscuro, y unas medias blancas con zapatos negros.

Luego me dirijo a el baño, entro y abro el grifo, dejo que el agua artificial llene la bañera, ya llena cierro el grifo, le hecho un poco de liquido, para llenarlo de espuma. Me despojo de la ropa y entro a la bañera, el agua relajando mis músculos, agarro un poco de shampoo y lo tallo en mi cuero cabelludo. Dejo caer agua en mi cabello para que salga el shampoo, cierro los ojos y me sumerjo en la bañera. Saco mi cabeza de el agua, y salgo de la bañera. Agarro una toalla blanca y me la coloco.

Salgo del baño y me dirijo a la cama, agarro la ropa, me pongo las bragas y el sujetador, dejo caer la toalla. Me pongo el uniforme, me dirijo a mi tocador y agarro el peine, lo paso por mi largo cabello. Me veo en el espejo, unas ojeras abajo de mis ojos se formaron. Agarro el rímel y lo paso por mis pestañas, después tapó mis ojeras. Luego agarro el brillo labial y prosigo a colocarlo en mis labios.

Es obvio ¿No?.

Ajá.

Ya lista, agarro mi mochila. Me dirijo a la habitación de Natalie. Y grito desde la puerta:

—¡Natalie!, ¿¡Lista!?

—¡No!

—¡Apurate mija!, ¡Llegaremos tarde!

—¡Voy!

Suspiro. Comienzo a caminar hasta la habitación de Brian. Toco la puerta, y el me abre ya listo con su camisa blanca, corbata, pantalón y finalmente los zapatos. Su cabello castaño desordenado, y con su mochila.

—Por lo menos tú estas listo.—Digo suspirando.—Vamos.

Comienzo a caminar hasta la sala a esperar a Natalie.

Veo el reloj de la pared.

7:00, todavía hay tiempo.