El Último Beso (Zac Efron)

Capitulo 15 (Final)

La lluvia cae con un poco de fuerza en gotas pequeñas, el sonido de ellas al golpear el pavimento se acoplan al ritmo de los latidos de mi corazón, que ahora mismo parece un tambor en una canción de una película de suspenso. El taxi nos deja frente a la casa de Amber, donde sé que dentro de ella se encuentra Zac, hoy volveré a verlo después de 2 meses, la única diferencia es que ahora se toda la verdad, él tiene leucemia, una maldita enfermedad mortal que amenaza con quitármelo, ya me separó de él por más de un año pero ahora estoy aquí, dispuesta a estar con él y luchar juntos, yo se que vamos a resultar ganadores, yo lo se.

Mike me ayuda con mis maletas, él pidió sus vacaciones para venir conmigo, sé que toda esta noticia le ha afectado mucho, Zac es su mejor amigo, y se siente mal por haberlo juzgado incorrectamente, pero yo creo que no debe sentirse así, pues yo también lo juzgué mal, ambos le tuvimos mucho coraje, pero, ¿quién se iba a imaginar lo que en realidad esta pasando? Zac supo hacer todo para que no sospecháramos de absolutamente nada.
Amber abre y entramos, siento como mi pecho sube y baja aceleradamente. No se que esperar exactamente, no se que valla a pensar Zac al verme aquí de nuevo y sobre todo no se como valla a reaccionar ahora que sepa que yo sé la verdad. 
—Creo que Zac esta tomando su quimio en su habitación, el auto del doctor esta afuera —dijo Amber mirando su reloj —¿Quieres que suba y le diga todo? O ¿Prefieres subir tú?
—Prefiero subir yo —le digo —quiero que sepa por mí que ya se toda la verdad.
—¿Quieres que suba contigo, o subes sola? —me pregunta Mike besando mi muñeca.
—Subo yo sola, gracias —lo abrazo con fuerza para darme valor, quiero que mi mejor amigo me trasmita fuerza, quiero que me anime a enfrentarme a la verdad, pues aunque ya lo se todo, se que será muy diferente verla.

Amber me indica donde es la habitación de Zac y subo. Con mis manos me voy apoyando del barandal para poder sostenerme, mis rodillas están temblando y siento que en cualquier momento se van a romper. Llego a la puerta, y escucho su voz, suena cansado y eso hace que mi corazón comience a apachurrarse, respiro hondo, él no me puede ver mal, se supone que yo vengo a apoyarlo, a demostrarle que puedo luchar a su lado, que no me importa nada más, lo único que me interesa es estar a su lado, él debe verme segura y fuerte, debe darse cuenta de que no pienso ceder ante nada. Tragándome el nudo que tenía en la garganta, llamo a la puerta.

—Pase —escucho la voz de un hombre algo mayor, quien supongo es el doctor.
Entonces abro con lentitud, mi corazón parece salirse de mi pecho en cualquier momento. La habitación de Zac es color blanco, igual que la mía, nuestro color favorito. Lo primero que noto es un porta retrato grande donde hay una foto, es la foto donde él y yo estamos frente al Ferrari blanco en el concurso de clásicos en Pittsburgh, mi vista comienza a nublarse, no puedo creer que él tenga esa foto, todo este tiempo él la a conservado, saber que me ha pensado y que me no me ha olvidado me hace estremecer enormemente.
—¡Tn___! —Escucho la voz de Zac y entonces lo miro, él esta claramente sorprendido de verme, puedo notar en su mirada que esta lleno de dolor por verme aquí y sobre todo por que yo lo vea de esta forma.

Zac esta sentado en un sillón con respaldo alto, lleva puesta una cobija en sus piernas que están estiradas, sus talones descansan en un descansa pies, hay algo aun lado, es una maquina con varios botones y una pequeña pantalla rectangular, arriba de ella hay un tubo alto y delgado del que cuelgan 2 bolsas que no se que contengan, de ellas salen unas mangueras que se unen al final donde un catéter toma su lugar, una aguja esta enterrada en su brazo. Entonces miro a Zac con detenimiento, esta un poco más delgado de lo que recuerdo, unas leves ojeras se han formado debajo de sus ojos, y eso es suficiente para que mi fortaleza se vea opacada por el dolor, un dolor que parece un veneno que se propaga y corre por cada centímetro de mi ser, no puedo fingir fortaleza ante esta imagen, no puedo, no me sale. Zac se ve tan frágil, tan vulnerable, es doloroso, extraño y horrible verlo así, jamás pensé que yo pudiera ver algo como esto, es demasiado para mi, es insoportable.