Carta Tres.

204 15 2
                                        

Para ti, Nate:

Hoy volvimos a ir a tu casa, no sabes todo lo que nuevamente esperé. Dos semanas fue demasiado tiempo. Según una canción que conozco, un día sin ti es como un año sin ver llover. Y realmente se siente así. Se forma un vacío en mi pecho, y mi mente se llena de pensamientos sólo de ti, a tal punto de que puedo sentir tus hermosos labios en mis mejores sueños.
Pero no todo es color de rosas, y lo sé. Hoy te comportaste distante conmigo. Te la pasaste todo el día mirando a tu móvil y sonriendo como tonto. No quiero pensar en que te has enamorado de otra que no sea yo. Pero está dentro de las posibilidades, y no tengo la valentía ni la confianza de preguntarte sobre tu vida amorosa, aunque la curiosidad me carcoma por dentro. Intenté hablarte, pero no me decías ni tres frases seguidas. No sé qué te sucede. Nunca fuiste así conmigo. Pensé que éramos algo más que solamente conocidos. Pensé que podíamos compartir más cosas. En fin. Sólo espero que no sea lo que creo que es.

-Andrea

Demasiado tarde Donde viven las historias. Descúbrelo ahora