Vivir De Placer. || V.B || ✔

Capítulo 2: Placer.

Un joven de cabello y orbes oscuras como la noche, clavaba él cuchillo en él estómago de la peli-rosa irritante, ella sollozaba, sus manos estaban atadas a la cama, desnuda, temblaba de dolor y miedo, pero al ver esa mirada tan divertida de él, sólo empeoró las cosas, ¿porqué me haces to?
Vegeta sonrió, no podía negar algo y es que esto, lo disfrutaba, ver la desangrarse, y ver como esa sangre escurría desde su vientre hasta su intimidad, le encantaba "eso le pasa por no complacer me" pensó divertido, y sacó él cuchillo.
—¿Porqué..? Argh... —Sintió dolor al hablar, no entendía porque este joven la quería matar y torturar, era algo terrorífico, su mirada, su placer al ver la así.
—Eres ridícula —Soltó una risa —Esto, es por no complacer me, sólo te pedí llegar a un orgasmo, pero no —Colocó él cuchillo en él cuello de ella —No supiste hacer ni eso siquiera —La joven sollozo.
—Lo lamento, lo lamento... —Gimió de dolor —Puedo recompensar te, dame una segunda oportunidad, por favor... Por favor —Vegeta cerró sus ojos molesto, odio ver a la gente suplicar, sonrió y abrió sus ojos, colocó su mano suavemente en él cabello de ella, por la parte de atrás, ella sonrió, pensó que él le daría otra oportunidad.
—Nah, mejor sufre las consecuencias linda —Con fuerza agarró él cabello de ella, y cortó su cuello, arrancando de un tirón su cabeza, sonrió orgulloso, dejando caer la cabeza de la chica, suspiró y se subió los pantalones, abrochando los, esto había sido demasiado complaciente para él.

Conducía hacía un hotel, no quería ir donde su molesto hermano "Kakarotto" sólo lo molestaría por dejar lo sólo todo él día, y se sentía demasiado bien como para que le bajaran él ánimo de golpe "nunca dejaré de hacer esto, es la única mierda que me hace sentir bien" se sonrió, mientras giraba en una curva, llegó al hotel que quería, "por fin" sacó las llaves del auto, apagando lo, se quitó él cinturón, para después bajar se del auto, acomodó su chaqueta, y cerró la puerta del auto, guardó las llaves en los bolsillos de su pantalón, para después guardar sus manos en los bolsillos de la chaqueta, se encamino al hotel llegando a la recepción, tenía una pequeña sala, y al frente estaba un chico que al parecer daba las habitaciones.
Se acercó a él —Hola, quiero una habitación —Él joven le sonrió.
—Claro, ¿nombre?
—Vegeta Miller —Un ruido fuerte hizo que mirará de reojo, vio a una chica entrar por la parte de atrás, muy agitada, estaba llorando, él fruncio en ceño confundido, la chica se sentó en la pequeña sala de la recepción.
—¿Cuanto piensa quedar se?—Vegeta dirigió su vista al joven.
—Unas noches, pon indefinido —Él joven asintió, y le entregó unas llaves.
—Su habitación es la numero 23, goce su estadía —Vegeta asintió, giró a ver otra vez a esa joven llorar, "¿qué le habrá pasado?" ni él mismo se creía porque estaba preocupado al parecer por esa chica de cabello azul. Se acercó a ella, tosió falsamente.
—¿Oye, estas bien?—La joven alzó su mirada, viendo lo, Bulma se quedó sorprendida, jamás había visto a alguien así, tan guapo como él, sintió su cuerpo estremecer se, como sí le hubiera pasado corriente.
—Sí, lo estoy —Murmuro con una sonrisa, él alzo las cejas divertido.
—Pues, no parecé mujer —Ella sonrió de lado, y sus manos limpiaron sus lágrimas.
—Creeme, estoy bien.
—¿Como te llamas?—¿qué sí tenía curiosidad? Claro que la tenía, no tenía ni un pensamiento sobre matar la, sólo conocer la, saber su nombre, al ver los ojos azules de ella, sintió un escalofrío recorrer lo, algo que jamás le había pasado.
—Bulma Winner, ¿y tú te llamas?—Estaba nerviosa, ese chico... Tenía que conocer lo.
—Vegeta Miller —Ambos se sonrieron, ¿qué pasaba con ellos? No sabían, pero debían hablarse, querían hacer lo.

Falto una insinuación de la joven, para terminar besando se, ambos sentía tanto placer, él placer que nunca nadie les ofreció.
Ahora estaban en la cama, arrancando de prácticamente sus ropas, Bulma estaba debajo de él, sintiendo tanto deseos por aquel desconocido, ella nunca se había entregado así a alguien pero no se estaba arrepintiendo.
Vegeta bajó los pantalones de ella, y con sus dedos corrió las bragas de ella, Bulma respiro entre cortada, mordió su labio, Vegeta al ver la intimidad de la chica no resistió, bajo su pantalón dejando ver su gran erección, entro rápido en ella, de la boca de la chica salían gemidos y de la boca de él, gruñidos de placer que los volvían locos a ambos.

Continuará....