Vivir De Placer. || V.B || ✔

Capítulo 6 : Pasión.

Sus labios estaban unidos, se movían al compás del deseó, al llegar al hotel empezaron a besar se, no podían creer cuanto se deseaban, al llegar a la habitación, él la tomó suavemente, cargando la para que enrollará sus piernas en la cadera de él, con cuidado la posó sobre la cama, se separaron para quitarse sus ropas, rápidamente, a ninguno le importó lastimarse, y a Bulma menos, se deseaban eso era lo que importaba, al estar desnudos, Vegeta comenzo besar los pechos de Bulma, con deseó, haciendo que ella se retorciera, su espalda se arqueaba involuntaria mente, él deseo recorría cada parte de su cuerpo y sólo sentía como él también estimulaba con sus dedos su intimidad ya humedad de tanto éxtasis, Vegeta sintió no aguantar más, querían volver se a entregar uno al otro, pero Vegeta no tocaba las muñecas de ella, estaban recién curadas, temía lastimar la, a ella, temía que pudiera herir la, él la ve tan frágil, tan exótica. Como sí fuera una chica de otro planeta, no podía creer lo que pensaba de esa chica, en tan sólo un día de conocer la ya sentía que debía proteger la, ¿la leyenda del hilo rojo aplicará para ellos?
Vegeta entro en él la intimidad de ella, profanando la, ella soltó un gemido de puro placer, sus manos estaban enredadas en él cuello de él, y sus piernas también en sus caderas, para sentir lo más cerca, para poder sentir él placer que este hombre le propinaba, comenzó a mover su cadera también, para sentir más placer en ambos lados, era lo mejor que le estaba pasando.
Vegeta estaba aferrado a la cintura de ella, guiando la, para dar más placer, su miembro se movía en lo más profundo de las entrañas de ella, sintiendo él placer único, sus gruñidos se hacían presentes, gruñía de placer, como un animal en celó, ella lo enloquecía, y es que su aroma tenía algo, es como sí soltará hormonas a las que él reaccionaba perdiendo se en su olor, Bulma empezó a sentir él placer del éxtasis, y sus gemidos crecieron, crecieron hasta llegar a un grito, cuando ese gran orgasmo la golpeó, Vegeta empezó a moverse más rápido, quería hacer la gozar hasta la ultima gota de placer, y también buscando su liberación, faltaron unas cuantas embestidas más para que su orgasmo pudiera llegar, haciendo que se desplomara sobre ella, Bulma lo besó suavemente, y él también le correspondió.

Al llegar al prostíbulo, buscó con la mirada a la chica, pero no se encontraba, eso lo extraño ya que era sábado, y ella siempre venía a trabajar desde temprano, a limpiar mesas y todo, como tenía tiempo libre quiso venir a ver la, pero ella no estaba, se acercó a la barra, donde estaba Black, quien era él gerente, Turles acomodo su sacó.
—Hola Black —El recién nombrado observó donde lo llamaban y sonrió.
—Buenas tardes señor Turles, ¿necesita algo?
—Sí, ¿donde esta Bulma? Pensé que los sábados ella llegaba temprano, y ya son las 5 de la tarde.
—Oh pues verá, ella al parecer no vendrá hoy, no me aviso nada, pero no voy a reclamar le por eso.
—Esta bien —Turles Fruncio su ceño, ¿donde estaba?
—Sí me disculpa, tengo cosas que hacer.

Continuará....