6. El comienzo del final.

63 7 0
                                    

Hace algunos años:
— ¡No iras a ninguna parte Ryan! — exclamó

— ¡Madre es una oportunidad de trabajo demasiado perfecta! — digo.

— Hijo no iras a ninguna parte estas corriendo mucho peligro si vas — dice mi padre mientras lee el periódico.

— Pero dios, por esas fotografías un periódico, revista o hasta una página web pagará miles, tendremos mucho dinero y no viviremos en esta pocilga — digo.

— ¡¿Pero cómo piensas volver a allá!? ¡Duramos casi un año para conseguir los boletos para acá! Y vivimos tranquilamente, no arriesgaras tu vida en esa guerra — dice mi madre.

— Per...

— ¡Hijo cállate y vete a tu habitación!.

A raíz de este comentario tomo un vaso de vidrio que estaba cerca y lo estampo contra la pared haciendo que se rompiera, subo a mi habitación y tomo mi pc y entro a un sitio web, busque la entrada más barata para esta noche directiva mi país natal, mi país en la cual está en guerra. Consigo en el más barato que sería para las 2:00 AM en 3 horas, tomo mi tarjeta de crédito y la pasó haciéndome deber una gran cantidad que no podré pagar si no voy allá, y tomo las fotografías. Es todo o nada.

Busco mi mochila y meto las cosas más importantes, comida, ropa, etc. Pague también un alojamiento en un hotel de baja puntuación. Salgo por mi ventana, saltando a travez de ella hasta el árbol que está al otro lado y bajar, tomo un taxi que me deja en el aeropuerto, antes de dar mi entrada a la señora, me quedo pensando todo lo que perderé, pero es solo un tiempo, al volver seremos millonarios, doy la entrada y monto al avión.

Luego de varias horas de vuelo, al fin tocar tierra, encendí mi celular y al verlo tenía cuentas de llamadas perdidas de mi mama, pero las ignoro, debe estar preocupada. Al salir del aeropuerto se ve todo normal y tranquilo, es muy tropical comparado a mi nueva casa, extrañaba este lugar, mi hogar natal.

PurgatorioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora