Nunca me lo imaginé

El chico nuevo.

Era una mañana lluviosa, sí, una de esas mañanas en las cuales no te provoca levantarte de cama. El día de ayer en "El tiempo" habían anunciado algo sobre fuertes lluvias, sin duda alguna tenían razón, podía observar claramente como gruesas gotas de lluvia golpeaban y se deslizaban por mi ventana, tenía mucho frío, tanto que sentía que me estaba consumiendo y mis dientes temblaban.

Me levanté de mi cama en busca de algo para cubrir mi cuerpo, el suelo estaba demasiado frío como para estar descalza y las gotas de lluvia golpeaban el techo y resonaban por toda mi habitación, miré la hora en el reloj de pared que tenía justo en frente, marcaba las 5:00am. Tomé una sábana y me volví a la cama para seguir durmiendo, definitivamente, con un clima como el de hoy no tenía ganas de ir al instituto.

- Samanta... Cariño, es hora de levantarse. - Oí a mi madre decir a lo lejos con voz suave, el clima estaba genial y ella venía a levantarme. Me parecía injusto.

- No quiero ir hoy, mamá - Susurré aun adormilada. Sentí como empezaba a sacudirme de un lado a otro. Sí que era insistente y más cuando se trataba de mis estudios. "Es lo primordial" solía decir, y tenía razón pero el primer día no era tan importante.

- Debes ir, es el primer día de clases, no puedes faltar... - Dijo y bufé. Podía ser el ultimo día si quisiera, pero con este clima lo único que me apetecía era dormir. Creo que me había acostumbrado en las vacaciones a despertar tarde.

- No quiero... - Susurré con fastidio y los ojos cerrados, me agarré a las sábanas, necesitaba conciliar el sueño de nuevo.

- No es si quieres... ¡Es que tienes que ir! - Habló molesta mientras me movía de un lado a otro con más fuerza. Ya me había despertado, no había manera de volver a dormir.

- ¡ Okey... Okey ya estoy despierta! - Le respondí fastidiada mientras me aferraba aún más a mi almohada... Instantes después oí la puerta cerrarse con fuerza. ¿Ahora mi madre estaba molesta? ¡ Yo soy la que debería estar molesta!, el dormir es algo sagrado.

Me levanté de la cama algo adormilada, me sentía cansada, volví a mirar el reloj de psred y de inmediato el sueño se esfumó, marcaba las 6:20am. ¡Iba a llegar tarde!, la entrada era a las 7:00, debía darme prisa.

Entré al baño y me duché lo mas rápido que pude, ahí mismo me vestí, tome mi mochila, mi celular y salí de mi habitación. Me sentía más despierta, más activa y hasta con un poco más de ánimos. ¿Y si hoy tal vez era un buen día?.

Al bajar, estaba mi madre sentada en el comedor, desayunando de lo mas tranquila mientras veía la tv, parecía concentrada, las lluvias continuarían...

- Mamá... ¿ qué hay de desayuno ? - Pregunte extrañada, me la imaginaba un poco mas molesta.

- No es el gran desayuno pero sé que te gusta. Galletas con nutella... - Respondió y tenía razón, eso me gustaba, me encantaba y por eso amaba tanto a mi madre.

Se me hacía agua la boca pero todo ese sentimiento se vio interrumpido cuando recordé que era tarde, 6:50AM.

Bufé con enojo, hoy que mi madre preparaba ésto, o al menos lo improvisaba, no podía comerlo y todo porque era tarde.

- ¡No voy a poder desayunar ya es muy tarde! - Dije en una queja mientras me dirigía a la salida intentando no mirar el plato donde comía mamá.

- Ésto es para que a la próxima no demores tanto... ¡No eres la dueña del instituto Sanmanta! - Dijo mi madre con una sonrisa. ¡Diablos! ¿se burlaba de mi?, ella lo disfrutaba.

- Nos vemos luego... - Agregué , mi madre se levantó y me dio un beso en la frente para luego decirme frases como " Cuidate " o " ve con Dios" y "ten cuidado".