Lo prometimos (Final)

37 1 0
                                    

Él se levanto haciendo ver un traje negro,una camisa blanca teniendo una corbata sin terminar de arreglarla y sus zapatos negros.
Se acercó al micrófono que estaba encima de un mueble de madera.

—Pues...—suspiró y rascó su cabeza—la mayoría sabíamos de tu enfermedad, que llegaría algún día pero no tan pronto.—Solo el dirigía la mirada hacia el ataúd donde se encontraba ella y tenía un vidrio donde se podría observar su cuerpo completo junto con un vestido negro mostrando sus curvas ya que estaba pegado,su cabello largo hasta abajo de su pecho y entrelazando sus manos abajo de su abdomen...encima de sus muslos había un balón de Americano, unas flores lilas, un par de fotos que estaba ella de pequeña sola o acompañada por familias y amigos.—Mi querida niña...mi hermanita..te amo, te amo...te amo.Supe que tu me admirabas como a nadie y a veces quería hacer cosas buenas para no decepcionarte pero no lo hice..no lo logre, perdóname, discúlpame por favor.—tomando aire y mordiéndose el labio inferior—Ahora ya no sé a quién hacerle "actitos de celos"—dirigiéndome su mirada dándome una sonrisa forzada con sus ojos cristalizados y rojos.

—Te amo.—Ahora se escuchaba más sollozos y el cerró los ojos provocando un sollozo más grande callando a los demás—¡Te amo Hermana!—puso sus manos a los costados del mueble aferrándose—Lo siento...lo s-siento tan-tanto...

Fueron dos chicos a sus costados sabían que él perdería la cordura en cualquier momento.

—¡¡NO!! ¡Joder!...¡Vuelve!

Corrió hacia ella y todos soltaban  sollozos, se cubrían con pañuelos para disminuir el sollozo pero era imposible, se escuchaba mucho peor.
Otro chico se acercó a él, los otros dos de igual manera se acercaron.

—¡Vuelve!¡vuelve por fa-favor!—se encimo sobre el ataúd y poso sus manos como almohada comenzando a llorar.—¡¡¡NO!!!¿¡Por qué!? ¡¡¿¿POR QUÉ??!!

Soltando sollozos aun más fuertes..haciendo que su padre se parará hacia él, tocando su hombro.

—¡¿por qué?!...despierta...des-despierta.

—Ya hijo, déjala...—con la voz entrecortada.—Anda, vamos.Nos duele verte así y a ella también.

Los 3 chicos lo ayudaron a pararse pero el arrastraba sus pies, cerrando sus ojos haciendo deslizar unas lagrimas y sollozando.

—Una dolorosa perdida—decía el padre estando de nuevo hablando por el micrófono—supongo que es imposible hacer hablar a alguien antes de que pueda terminar en un mar de lágrimas...

2 horas después
De haber terminado de escuchar unas palabras dedicatorias, se observaba a la gente sollozando, acercándose al ataúd, persignando, dedicándoles palabras.
Sus padres solo estaban al principio de la hilera de la sillas, recibiendo palabras y abrazos..
Su hermano cerca del ataúd sentado,con la mirada perdida tomando ahora un whisky y viendo sus ojos deslizar lagrimas sin tomarse la molestia de limpiarlas.
Una que otra vez se acercaban a él para hablarle y darle un pésame, pero el solo se limitaba a asentir con la cabeza.

Esperé un rato para que el se retirara, la verdad no quería que nadie mas me escuchará y sabía que su hermano iba a pararse para desahogar su vejiga de tanta bebida.
Pasaron menos de 10 minutos y su hermano ya no estaba. Me acerqué, tome la silla.

Antes de hablar vi su rostro admirando cada parte suya, lo que mas adoraba, extrañaba...todo de ella me enamoraba.
Y aun me enamora, su cabello había crecido desde la última vez que la vi, su cuerpo ¡Joder su cuerpo como enamoraba! Sus piernas blancas, su rostro blanco, sus manos, las únicas que me harán sentir calor...
Mire un poco más las fotos y observe una en especial, donde yo la abrazaba por atrás y ella tomaba la foto a través de un espejo. Apuesto que fue su hermano a pesar de ser celoso había un razón.

—Creciste bastante, creciste lo insuficiente para dejar de hacerlo...extrañare cada estúpida pequeña que me hace recordarte, pero sabes, desde siempre extrañe esas cosas, cosas que te formaban, tu cabello tan distinguible entre otras, tus labios que solo me derretían, tus ojos que tienen más de un brillo en él, esos sobrantes brillos que demostraban lo cuan feliz eras, pero ya no veía tus brillos en esos ojos después de romper...ya no lo veía, yo había arruinado tu felicidad. —Hice mis manos en forma de puños sobre mis rodillas.— Perdóname, por haberte arruinado tus brillos en esos ojos que ya no sabré si habrá o no algún brillo después, perdóname Mell, perdóname..perd-dón.

Hubo un silencio en mí quería decir todo lo que no pude pero tal vez se lo podría decir después, pero quiero hacerlo ahora, quiero que me escuche, quiero que lo haga, lo tuve que hacer por que sentía mi voz entrecortada, mi garganta arder y mis ojos apunto de llenarse de lagrimas.

—Lo prometimos...¡Joder! Lo prometimos Mell, pero quién hubiera dicho que esto se adelantaría, quise cuidarte y disfrutar cada momento contigo, siempre lo supe...supe de tu enfermedad, jamás te lo dije por qué no quería que dejarás de disfrutar, de solo pensar en eso, no quise afrontarlo, fui un cobarde. Te termine por que no quería perder a la persona que estaba a mi lado, estar a tu lado en esos momentos que te llegarán a dar ataques, no sabría como afrontarlos...aun que me lo imaginaba me llenaba de miedo pero en tus últimos días en el hospital lo afronte, lo vi por mis ojos como te daba uno y fue el último.
Lo que nunca quise ver lo termine por hacerlo.—esboce una sonrisa, lo que dije fue tan irónico y a la vez lógico—Lo que nunca quise terminó pasando de una manera, perdóname...—se me entrecortaba la voz y tenía que esperar, no quería que me vieran llorar no ahí. No sin ella.—Yo, jamás vi el daño que te hacía, siempre vi que eras feliz hasta la fecha que tu hermano me a dicho que aún me amabas, que por eso no tenías a alguien más, pero nunca quise detenerte, pero ahora tu te haz detenido en medio de la vida, en mitad de una frase .Te amo. Siempre lo hice. Lo haré, lo hago...¡Jo-Joder! —pose mis manos a la orilla del ataúd no me contuve más, agache la cabeza provocando que mis lagrimas descendieran haciendo pequeños sollozos.—Mell,solo vuelve¿sí?¿me escuchas?mantén tu promesa..vuelve para mantenerla, te necesitó. Regresa, por favor, hazlo, cumple la promesa....Te necesitó.

—Ella siempre te necesitó—dijo su hermano.

Eso fue lo que hizo que un vuelco saliera de mi estómago, la garganta me quemaba,

los ojos haciendo que vista se volviera borrosa, mi respiración entrecortada...soltando sollozos más grandes que los anteriores.

—Lo siento. Mell vuelve de nuevo, te extraño, te amo por favor vuelve...vuelve, prometerlo. Vuelve,no me hagas esto, ¡por favor!despierta.—Me acurruque sobre ella, algo me lleno de tanta desesperación en mí que abrí el ataúd, toque su rostro, me senté a la orilla, la levante abrazándola haciendo que su cabeza quedará en mi pecho y las lagrimas cayendo por sus mejillas... frías—vuelve, solo vuelve. Mell. Hazlo¡¡Por favor!!¡Joder! No me dejes, no me dejes de esta manera. Te necesitó.

Una voz cerca de mí, hizo que reaccionará.

—Ya no cariño, perdón XXXXX.

Volteé para mi derecha y no había nadie...

~×~
Holaaaaa, espero que le haya gustado el final, lo quise hacer con más lagrimas pero espero que el final haya sido así.
Cambie de opinión y decidí hacer un Epilogo :)

Gracias por leer, espero sus estrellitas y comentarios al respecto de la historia.
Bonita noche<3.


Mi Huracán.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora