"Te escuché gritar anoche" April Scarlett estaba parada frente al refrigerador con el ceño fruncido. Sus ojos azules se desviaron un momento cuando la vio entrar, mostrando la gran curiosidad que sentía y, en medio de eso, su preocupación.
"Buenos días a ti también" fue lo que Katie alcanzó a decir mientras agarraba una manzana que alguien -probablemente su hermana- había dejado allí. "Solo fue una pesadilla, como siempre." Intentó darle un tono indiferente, pero no estaba segura de cuán bien lo había hecho.
April sacó un cartón de leche y se volteó hacia ella, poniendo el cartón en la mesa que las separaba. Sólo con mirarla, Katie supo que necesitaba clases de actuación urgente. Su mirada, esta vez llena de pura preocupación, se enfocó en ella."Kat, siempre es solo una pesadilla. Desearía que confiaras un poco más en mí. Tal vez podría, no sé, hacer algo." Sus ojos marinos se centraron en los suyos, rogando que le contara algo que pudiera darle una pista para ayudarla.
"No, April" fue lo único que pudo decir, mientras caminaba hacia la alacena, buscando, sin éxito, algo que pudiera distraer su mente para así poder pensar en otra cosa que no fuera el recuerdo de la persecución. Y el dolor. "Ya es suficiente con que yo tenga pesadillas extrañas. No quiero que tú te vuelvas más loca que yo."
Encontró la caja de cereales que estaba buscando y se dirigió al armario para buscar un plato. Aun dándole la espalda, añadió: "De verdad, está bien." Se volteó hacia ella y añadió:" Estoy bien" mirándole a los ojos, fingió una sonrisa segura que no sentía. "No me pasa nada, y tampoco creo que me vaya a pasar algo. Fue solo una pesadilla. Esas cosas no suceden en la vida real, es solo mi imaginación jugando trucos conmigo. Miles de personas tienen pesadillas y no significa que vayan a morir pronto. Además..."
"Estás balbuceando." April le dirigió una mirada cautelosa, la examinó por unos minutos y luego suspiró. Sonó la alarma indicando que el microondas había terminado, pero April se sentó frente a Katie. "Deberías intentar compartir lo que te pasa. Nunca le dices nada a nadie. Tal vez si se lo dijeras a otra persona, las pesadillas mejorarían. O se irían completamente."
"A, ya hemos hablado de esto. Las pesadillas son cada vez menos consecutivas. No me va a pasar nada y es estúpido pensar otra cosa. Ahora, pásame la leche y dejemos de hablar de pesadillas."
La mirada en el rostro de su hermana le revolvió el estómago. De repente se volvió una chica pequeña ante sus ojos, con una obvia preocupación por su hermana. Soy un monstruo, ¿no? Ella sabía que su hermana solo estaba preocupada por ella, pero no quería que se viera involucrada en sus pesadillas.
"Así que siempre que alguien se preocupa por ti es algo estúpido, ¿no?" Un pequeño hilo de voz se deslizó fuera de la boca de April, mostrando decepción y un sentimiento que no podía identificar bien pero que podía interpretar. La había herido. Claro, no había sido su intención, pero sabía que lo había hecho.
"April, lo siento. No quiero decir que tus sentimientos son estúpidos. Es bueno saber que, si algo me pasa, tengo a una persona que estará dispuesta a ayudarme. De verdad lo aprecio. Pero debes entender que sólo son pesadillas tontas sin sentido."
"Si son tan tontas, ¿por qué no le puedes contar a nadie? Nos estás preocupando a todos. Y realmente digo a TODOS."
Katie suspiró y se preparó para decirle otra cosa, pero April se levantó y cortó el hilo de la conversación. "Voy a comer y subiré a cambiarme. Sin decir otra palabra, cogió un sándwich que se encontraba dentro del microondas y su vaso de leche, se volteó y caminó hacia el comedor.
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El camino a la escuela se estaba volviendo demasiado largo y callado. April tenía ambos audífonos puestos, conectados a su iPod, y escuchaba música lo suficiente alta como para que Katie supiera cuál era cada canción. Katie se centró en la carretera, o lo intentó. Sin éxito. Detuvo su auto en el paseo mientras April la miraba desconcertada.
“Lo siento” fue lo primero que dijo. Cuando vio que April se preparaba para decir otra cosa, la interrumpió y dijo lo primero que le vino a la mente. “Soñé con Kirk montando un unicornio” Enseguida se golpeó mentalmente. Skar, ¿en serio? Si decías que soñaste con un tren aplastándote sonaría más creíble.
April la miró incrédula. “¿Y eso te hizo gritar como si te estuvieran matando?”
“No, la parte en la que un dinosaurio salvaje aparece y se lo come de una mordida sí.”
April lanzó una carcajada. “Sólo, ¿qué diablos tienes en la cabeza?” Miró hacia al frente y continuó riéndose con una risa sofocada por su mano. “¿Y eso era lo que no podías contarnos? ¿Qué Kirk estaba siendo víctima de un dinosaurio?”
Katie se tragó su orgullo y asintió, riéndose un poco con ella. "No es normal soñar con dinosaurios y unicornios cuando tienes 16 años, A. Es... simplemente extraño." Sintió la mentira quemar su garganta. Odiaba mentir, y más a su hermana, pero no podía contarle las cosas que estaba soñando. No ahora. No nunca. "Además, lastimaría el ego de Kirk sí digo que me lo imaginé sobre un unicornio. Aunque, si me preguntas, nunca pensé que montar un unicornio fuera tan sexy."
"¿Podemos seguir nuestro camino a la escuela antes de que me hagas vomitar hablando de Kirk?" April hizo una mueca de asco completamente falsa.
"Oh, y su pecho se veía tan acogedor... Me tuve que resistir para no correr hacia él en el sueño." Katie se mordió un labio y le dio una sonrisa coqueta. "Ahora que recuerdo, ¿te conté acerca de la vez en la que...?"
"¡Oh, por Dios! ¡Cierra la boca!"
"Está bien, está bien. No quiero traumarte de por vida. Pero, ¿prometes no contarle a nadie sobre el sueño?
“Trato hecho.”
Katie condujo el resto del camino, pero ahora, en vez de un silencio incómodo, había risas, una radio vieja a todo volumen y dos voces completamente desentonadas que seguían la música sin saber la letra.
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Traicionando la Sangre (Pausado)
Fiksi RemajaKatie Scarlett no necesita nada. No es precisamente la chica más popular de la escuela ni tiene el cuerpo de una modelo. En realidad, Katie es de estatura promedio, algo gordita y con un pelo incontrolable (o un pelo con libre expresión, como le g...