6. Estúpido Scott.

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Peto en la puerta, y la abro.

-A que se debe esta tardanza señorita Jones. -me mira fijamente a través de sus grandes gafas.

Sonrio inocente y digo- pues que me quede dormida.

Siento que alguien se ríe detrás mia, me doy cuenta que es el idiota con el que me choqué.

Levanto el pie y le doy un pisotón, el se calla al instante.

Sonrio para mis adentros.

-Bueno pase, pero que sea la última vez, que tarda tanto. -me dice, para luego mirar, al tonto que aún está parado en la puerta.

Ella pone los ojos en blanco y bufa.

El chico sonríe divertido.

-No hace falta que me diga nada señorito William. -dice con voz amarga y cansada.

El entra en la clase, como si nada pasará y se sienta con una chica rubia y oxigenada.

Todas las chicas, suspiran al verlo pasar y ponen caras soñadoras.

Serán necesitadas, agh, que asco dan.

En toda la clase de matematicas, sentía una mirada en mi nuca que me estaba poniendo incómoda.

Cuando gire la cabeza, pude ver al idiota mirandome, fijamente.

Ruedo los ojos y el sonríe burlón.

Me giré para no mirarle la cara de simio que tiene.

Cuando sonó el timbre, recogí las cosas rapidamente.

Salgo por la puerta y siento que alguien me tapa los ojos, yo instantáneamente le pego con el codo.

-¡Auch! -dice al chico al que pegué.

Me doy la vuelta, y abro los ojos, me doy cuenta que le pegué a Nate.

-Ups, perdón, pensé que eras otra persona. -le digo mirándole fijamente y intentando aguantar la risa por la mueca de dolor que tiene.

-Ya veo ya -el coge aire, y se recompone.

-Bueno vamos a la cafetería? -le pregunto.

-Claro, vamos -me dice sonriendo, pasa su brazo por mis hombros.

Llegamos a la cafetería, y fuimos a pedir la comida.

Fuimos a una mesa bastante alejada de las otras mesas.

Después de unos minutos llegan Emma y Megan.

—Hola nos podemos sentar? —dicen las dos.

—Claro. —les digo yo.

Emma se sienta de un lado y Megan del otro.

Nate se me queda mirando confundido.

—Haber que os presento,  Nate ellas son Megan y Emma, compañeras de habitación, Emma y Megan el es Nate me ayudo el primer día y ahora somos amigos.

--Hola Emma y Megan --dice el mirándolas fijamente.

--Hola, Nate, encantadas de conocerte. --dicen amablemente.

El les sonríe, me mira y dice.

--Que tal tus clases Ash. --me dice mirandome divertido, ya que sabe que odio todas las clases.

--Genial, fueron super divertidas. -- le digo fulminándolo con la mirada.

El sigue mirándome divertido, me giro y veo a Emma y Megan mirándonos a los dos extraños por nuestra actitud.

De repente me empiezo a reir, y luego Megan, Emma y Nate también se empiezan a reir.

--Si vierais vuestra cara. --me sigo riendo como loca.

Megan y Emma se paran de reir y me miran de mala manera.

Yo me paro de reir inmediatamente, y ellas sonríen y chocan puños.

De repente toda la cafetería se calla y miran para la puerta, yo me giro veo al idiota que aún no se como se llama y no me apetece saberlo.

El gira la cabeza hacia la mesa donde estamos, me mira, sonríe y me guiña un ojo.

Yo pongo una mueca de asco y el al ver lo que hice sonríe aún más, me giro porque en algún momento vomitaré como siga viendo esa cara de simio mal formado.

Me doy cuenta que toda la cafetería me está mirando, veo a mis amigos que están con los ojos abiertos como platos, mirándome asombrados, debe ser por lo que acaba de pasar, como si fuese algo tan importante.

--Que? --les digo para que me dejen de mirar así, pero siguen igual, ruedo los ojos.

Doy un golpe en la mesa y toda la cafetería para de hacer murmullos y mirarme y se giran a hacer lo que estaban haciendo, muy así me gusta.

Mis amigos brincan del susto, y se miran entre ellos, y luego me miran a mi.

--Tu sabes lo que acaba de pasar --dice Nate susurrando como si fuera un secreto, no entiendo porque se comportan así.

--Nada importante --le digo encogiéndome de hombros.

Se vuelven a mirar entre ellos, y Emma dice.

--¿¡COMO QUE NADA IMPORTANTE!? --dice gritando-susurrando.

Nate y Megan asienten por lo que dice Emma.

Pero porque le dan tanta importancia, me acabarán volviendo loca.

--El chico más mujeriego de esta escuela te acaba de guiñar un ojo y sonreír. Y aún te atreves a decir que no es nada importante, me estas tomando el pelo no? --me dice aún asombrado por lo que acaba de pasar.

--Y ese chico tan mujeriego que me acabáis de decir, como se llama? --le pregunto mientras como de mi hamburguesa como si nada pasara.

--Scott, Scott Willams, el chico más mujeriego de esta escuela, el rey de todo esto, el capitán de fútbol americano, el más deseado por todas las chicas.

--Interesante-- le digo, me levanto de la mesa.

-- A donde vas?.

--No se ya veré. --les digo.

--Okey. --responden los tres a la vez.

--Bueno ya nos veremos después. --voy caminando hacia la puerta para salir de esa cafetería.

La gente me mira, y siguen murmurando, no se podrán meter en sus vidas, enserio está gente me da mucho asco.

Salgo de la cafetería y suspiro aliviada, de irme de ese infierno, doy vueltas hasta que encuentro un sitio donde estar.

Voy hacia allá y me apoyo en el árbol, por lo menos aquí se puede estar tranquilo.

Cojo los audífonos, voy al playlist y dejo que las canciones se escuchen aleatorias.

Bueno aquí tenéis otro capítulo espero que os guste mucho igual que la historia.

Chaooo, lectores.


¿Yo enamorarme?,en tus sueños. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora