Jhade llevaba aquí ya una semana. Una semana entera. Y no había visto ni a su padre ni a su madre desde aquellos primeros días. Ni siquiera a Blay. O John Matthew. Así que, oye, se sentía como en casa. Se le daba bien esto de ser ignorada.
Pero a quien intentaba engañar.
Se sentía dolida.
Se sentía decepcionada. Nalla y Mariah no la habían dejado sola ni un solo momento, quedándose a dormir y ayudándola a comprar ropa online. Hasta un vestido para la fiesta de esta noche habían conseguido.
Resopló.
¿Para qué iban a hacer una fiesta cuando claramente ella les importaba una mierda?
Se quería marchar.
Volver a St. Mary’s y pretender que esto nunca había ocurrido.
Solo que Nalla había adivinado por donde iban sus pensamientos y la había avisado de que si pasaba por su transición y no tenía sangre de un macho vampiro para alimentarse, moriría.
Y eso no era simplemente una opinión.
Un golpe en la puerta la sobresalto.
- Entra.
- Hola hija mía.
- Layla.
Dolía, aunque no quería que fuese así... Intentaría fingir que no le importaba. No se podía permitir dejar que le importara.
- Siento tanto no haber estado aquí estos últimos días. Yo eh… pase por mi necesidad.
La última palabra la dijo en un susurro y acompañada de un bonito sonrojo.
Ah. Ahhhh.
- Vaaaaale.
Sonrió, y unas lágrimas amenazaron con aparecer.
- Casi pensé que tu…
- ¿Qué?
- Que no te caía bien o algo. Que está bien, no pasa nada si es así. Estoy acostumbrada, es que me había parecido que…
- No podrías estar más equivocada. La única razón por la que no he venido es por lo de mi necesidad.
Layla se acercó y la abrazó con fuerza.
- Te quiero. Eres lo mejor que me ha pasado. Lo mejor que nos ha pasado a mí y a Qhuinn.
- A él tampoco lo he visto en toda la semana.
- Ay mi niña. El ha estado liado con cosas de la Hermandad. A veces pasa. Pero sé que él te quiere tanto como yo. De eso puedes estar segura.
Otro golpe las interrumpió y Layla le abrió la puerta a Nalla y Mariah.
- Hey chica, ¡vamos a prepararte para esta fiesta!
*-*-*-*
John tomo otro trago de su Jack Daniels. Solo estaba aquí porque no tenía ninguna excusa lo suficientemente buena para no estar. No la había visto en una semana, aunque había estado en su mente día y noche. No podía dejar de pensar en aquel beso. Y Blay lo sabía, ya que no dejaba de dedicarle miradas desaprobadoras.
Hasta había ido al Iron Mask, esperando que si se tiraba a alguien, se olvidaría de ella.
Ya.
Y una mierda.
Ni siquiera se ponía duro.
Joder y se suponía que estaba de luto recordando a su shellan.
Una conmoción en el vestíbulo hizo que levantara la mirada.
- Ahí está...
Erección instantánea.
Verla bajar las escaleras debería de haberle recordado a la ceremonia de emparejamiento con Xhex. Pero Jhade era tan distinta que no podía comparar.
Xhex había tenido el pelo corto, el Jhade era largo.
Xhex había tenido la piel pálida, la piel de Jhade era bronceada, casi brillaba.
Xhex había sido puro musculo, un cuerpo casi masculino. Jhade era la hembra más sensual y femenina que había visto jamás, con unas curvas preciosas.
Curvas cubiertas por un vestido verde y azul.
Un vestido a juego con sus ojos.
Jo-der.
Iba a matarlo.
Ella miro a su alrededor como buscando a alguien y cuando su mirada se fijo en el, se quedó ahí, realmente pensó que su corazón dejaría de latir.
Alguien le puso un brazo alrededor de los hombros y lo medio empujó medio arrastró hacia la habitación de juegos.
- Tienes que parar eso John
- No estoy haciendo nada.
- Estas comiéndotela con los ojos. Y si yo lo puedo ver, otros también pueden.
- No puedo remediarlo vale. Y no voy a hacer nada al respecto.
- Aun.
- Jamás.
- John.
- No pienso arriesgar mi amistad con Qhuinn. Y ella no puede reemplazar a Xhex.
- Me da a mí que ya lo ha hecho.
- Que te den.
Qhuinn entró impidiendo que Blay respondiera.
- Aquí estáis. Tíos, ¿por qué os escondéis aquí? Venga, que es la fiesta de mi pequeña! Tenemos que olvidarnos de la mierda de Havers durante unas horas y darle la bienvenida que se merece.
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FanFic Hermandad de la Daga Negra * A - Lover Embraced
FanficEsta historia ocurre 25 años después de ‘Lover at Last’, la historia de Qhuinn y Blay. La guerra con los Lessers sigue como siempre, y una noche de lucha, Qhuinn y John Matthew se encuentran con alguien que jamás esperaban ver. Alguien que volverá l...