Quiero recordarte... ¿Me dejas?

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Revolvió todos los muebles de la casa solamente para encontrar algo que le ayudase a abrir aquella puerta —la cual estaba prohibida para él y para todos lo que pisasen la casa-. Sans se sentó en el suelo de su habitación con decepción, ahora que tenía la oportunidad de por fin conocer al misterioso monstruo que vivía allí no encontraba nada que le brindase un mínimo de ayuda.

- « Jodido Grillby y su obsesión de limpiar todo » -Aunque no era nadie más que él el que tenia como obligación limpiar la casa. - «, ¿mh? » -Mirando en una de las esquinas del colchón sucio, pudo ver lo que parecía ser el pinche que Grillby usaba para sostener algunas de las fotos que también Sans tenía como prohibidas.

Rápidamente se levanto del suelo, tropezando con su desesperación y cayendo en aquella esperanza que hace instantes creyó perdida. Murmuró unas cuantas cosas y se acomodó la ropa. ¿Cuando habían visto así de feliz a Sans? Fue hacia la lámina de madera que le obstruía el paso e introdujo el pinche en la cerradura, moviéndolo con concentración y cálculo.

Cuando escuchó que la puerta se abría, se felicitó como nunca lo habían hecho. Si Grillby no lo quisiera matar estaría muy orgulloso de él, digo, por fin hizo algo sin tener que llamarlo y pedirle su ayuda como siempre lo hacía.

- « ¡Te dije que lo lograría! » -Papyrus, más que sorprendido, jadeo por ver a Sans después de tanto tiempo en el que permaneció recluso —y seguía siendolo-. El dolor físico dejo de importarle, las cadenas que lo mantenían prisionero parecieron desaparecer en ese instante; solamente existía Sans, su mirada desesperada lo visualizaba solamente a él. Era lo unico que quería ver en aquellos segundos de nostalgia. - « Oh, amigo... ¿Es-estás llorando? » -Papyrus apretó la tela de su boca, bajando la mirada y dejando que las amargas lágrimas mojasen la tela de su bufanda. - « Uh... Yo, ¿cómo te llamas...? » -Se rascó detrás de la nuca, haciendo que Papyrus viese las marcas de sus clavículas en todo su esplendor.

Sólo un poco más y su corazón dejaba de existir.

" Papyrus "

Movió sus manos, las cuales dolieron por las heridas y quemaduras provocadas por el mismísimo Grillby.

", tu hermano. "

Sans esperaba impaciente una respuesta, pero el silencio que emanaba del otro esqueleto le dejaba en claro que no la tendría a menos que se esforzara un poco más.

" Por favor, Sans "

- « Si no quieres hablar, es-esta bien. Entiendo. » -Sans se sentó enfrente de Papyrus, sonriendo pese a la tristeza que sentía. ¿Tanto desprecio le tenia el mundo? ¿Acaso nunca podría tener un amigo? - « Mi nombre es Sans... por si te interesa. » -Rio, mirando el suelo.

" ...¡recuerdame! "

Pero como siempre, nada sucedió.

★★♤★★

Adivinen quién se acordó que tenia wattpad xD Sorry, ando mal de ánimo y sumando mis inseguridades junto con problemas del pasado que siguen doliendo todo vale mierda.

PERO ya volví, y tengo muchas ideas para esta historia uvu

Los quiero mucho chicos ♥

Yoooo tomo vino y cerveza, para olvidarme de ellaaaa
Toooomo y me vuelvo locoooo
Loooooco de la cabeza ♬