Resulta emocionante viajar, conocer culturas nuevas, gente nueva y sobre todo crear nuevas historias.
Se podría decir que viajar es mi actividad favorita, pero se convierte en algo complicado cuando tu situación económica no es del todo favorable.
Pero yo había tenido la mayor suerte del mundo, una universidad de Seúl, Corea del Sur, me había seleccionado para que yo fuera a estudiar toda mi carrera universitaria en Seúl con todo pago. ¿El objetivo? La verdad, no tengo la más mínima idea. Después de escuchar que había sido seleccionada deje de prestar atención y empecé a fantasear con lo increíble que seria Corea.
Haciendo esta historia un poco más corta y para resumirles las incontables horas que pase sentada en el avión, ya he llegado a Seúl y me encuentro sobándome el trasero ya que, de verdad, siento como si me hubiera sentado encima de una piedra durante 24 horas.
Gracias a los doramas, varios blogs de aprender coreano y incomodas charlas con coreanos mediante chats, conseguí un nivel de coreano bastante bueno. Poniendo en practica todos mis conocimientos de coreano, cogí un taxi para ir al apartamento que la Universidad había preparado para mi.
Después de impresionarme con el lugar donde me hospedaría descubrí que al día siguiente llegaría mi compañera. Al parecer también pertenecía al programa de intercambio. Pero por el momento solo quería tomar una ducha, comer algo y dormir 72 horas si es posible.
No pude dormir mis 72 horas deseadas y solo dormí 8 debido al 'hermoso' jet lag. Después de que todo rastro de sueño desapareciera de mi cuerpo decidí ir a descubrir Seúl.
Hice un largo tour por todo aquello que llamaba mi atención pero de nuevo el cansancio me venció y mañana debía ir a mi primera clase, así que opté por hacer el mejor plan del mundo: Pizza y películas.
Cuando llegue al apartamento,emocionada con la idea de comer 3 pizzas mínimo, me di cuenta de que ya no estaba sola. Una hermosa chica de tez pálida, con cabello negro y ojos del mismo color estaba sentada en la sala del apartamento. Ella giró su cabeza sorprendida y cuando me miró una gran sonrisa se formo en su cara y salto del sofá. Se colocó delante de mi y dijo con la voz más entusiasmada que había escuchado nunca:
-Tu debes de ser Sofía, ¿cierto? Yo soy Ariana, encantada.
-¿Como sabes mi nombre?- Sí, eso fue lo único que llamo mi atención.
-¡Ah! Eso... Lo vi en tu documentación, por cierto, no deberías salir sin ella por ahí.
-Aah.. okay...Espera, ¡¿qué?! ¿Has revisado mis cosas?
-Fue totalmente sin intención, por cierto, adoro tus braguitas de mi Mickey Mouse
Mi reacción fue ponerme más roja que un tomate.
-Eh.. eh... Fu..fue... fueron un regalo.
Ella solo soltó un pequeña risa. Yo ya no sabía que decir así que opte por preguntarle por ella pero antes de poder pronunciar una palabra, ella se adelanto.
-Acabo de ordenar 3 pizzas y planeaba sentarme a ver películas. ¿Quieres unirte?
A lo que asentí como una niña pequeña cuando le van a regalar un juguete.
El resto de la noche fue entre risas y ella contándome que venía de Estados Unidos. Y que lo que más le emocionaba del viaje era poder conocer a sus idols. Tenía el presentimiento de que ella y yo seríamos increíbles amigas.
Al día siguiente, Ariana vino a despertarme y me levanté con la mayor pereza del mundo... aunque eso es igual en Corea o en el culo del mundo.
Opte por ir lo más cómoda posible.
Ariana y yo desayunamos lo más rápido posible y nos fuimos corriendo a la universidad.
Cuando logramos entrar en el gran edificio, seguimos corriendo con la mirada de todos encima. Ibamos tan deprisa que no fui consciente de que me choque de frente con alguien.
Cuando estaba en proceso de levantarme, escuche a alguien:
-¿Acaso no ves por donde vas? ¿Te hacen falta ojos? Por tú culpa mi pelo no esta tan fantástico como siempre.-
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✖ Love me right. ✖ Jackson; GOT7☺
FanficTodo iba increíblemente bien. Mi viaje a Corea era lo que siempre había soñado, pero todo lo bueno se acaba. Y en este caso, lo bueno se acabo el primer día de mi nueva vida. ¿Han llegado a conocer a alguien que con solo hablar te dan ganas de darl...