Mikayuu || Mermaid AU ||Black Pearl

CAPÍTULO 10

—¡Ah, Crowley-kun! ¿Lo trajiste?

—Sí, tal y como me dijo —respondió el tritón enseñando un colgante en forma de vieira.

—Bien bien... Nadie te vio, no?

—Absolutamente nadie.

—Perfecto, hora de llevar a cabo mi plan. Si mis cálculos no fallan, quedan cinco minutos para que el petrolero pase por aquí...

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—Yuu, querido, ¿Puedes hacerme un favor?

—¿Qué pasa?

—Que el estúpido de tu padre compró guisantes verdes en vez de millo de la marca Gigante Verde, ¿Podrías acercarte a la tienda y comprar dos latas?

—¡Pfff...! Claro, Shinya.

—¡Menos risitas, bakayuu!

El mencionado salió de la casa sin hacer caso a su padre y fue en dirección a donde estaba la tienda. En el camino de regreso a casa vio una silueta en el mar haciendo piruetas, así que decidió acercarse un rato a las rocas en donde pasaba las tardes con el tritón.

—¡Mikaaaaaaa! —llamó Yuu de un grito, el mencionado se acercó rápidamente a las rocas y abrazó a su amigo. (""""amigo"""" entre muchas comillas)

—¡Buenas, Yuu-chan! ¿Qué llevas ahí? —dijo señalando la bolsa.

—Nada, recados de Shinya por culpa de las gilipolleces de mi padre —respondió Yuu riéndose.

—No está bien que hables tan mal de tu padre... ¿Acaso no te llevas bien con él?

—Bueno, a veces es un idiota, pero aún así lo quiero.

—Hmm... Tienes suerte... —dijo Mika con una sonrisa nostálgica.

—¿Huh? ¿Por qué lo dices?

—Mi padre murió hace cuatro años.

— ... L-lo siento...

—No pasa nada, ya lo he superado... Aún así, tengo a mi madre. A veces creo que me sobreprotege mucho porque teme que me pase lo mismo que le pasó a mi padre.

—Ehh, n-no quiero ser cotilla pero, ¿Qué le pasó...?

— ... Fue un día de tormenta. Se sospecha que la corriente lo arrastró hasta una zona rocosa, con piedras afiladas. Nadie hubiera sobrevivido a eso.

—Ah...

—Pero bueno, eso fue hace ya tiempo. Ahora hay que preocuparse por el presente; amigos, familia... Tú...

Yuu se sonrojó rápidamente y desvío la mirada cuando el tritón lo abrazó por la cintura, apoyando la cabeza en su hombro. Mika abrió la boca para decir algo, pero Yuu lo cortó en seco mirando su reloj.

—¡Ay dios, que se me hace tarde! He de volver a casa, Mika, quedamos por la tarde en este mismo sitio.

—Pero, t-te iba a decir que-

—Me lo dices por la tarde, vale? —respondió el pelinegro revolviéndole el fleco al tritón —¡Hasta luego, Mika! —Yuu se levantó de las rocas y, cogiendo la bolsa que había traído, se fue rápidamente dejando al tritón sentado en las rocas con la palabra en la boca.

«Te iba a decir que... Me gustas...» pensó Mika con pesadez.

MIKAELA POV